El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Ribera del Duero calificó este lunes la añada de 2017 como ‘Muy buena’. Así lo desveló el presidente del Consejo Regulador Enrique Pascual quien declaró que se trata de “una cosecha muy buena, que tiene aptitudes de excelente, pero que es muy buena”.
Este año, se constituyó un Comité Excepcional de Calificación de la Añada, del que formaron parte ocho de los mejores sumilleres de España, que desarrollan su actividad en establecimientos de referencia de la geografía nacional, poseedores de la preciada Estrella Michelin.
Así, el Comité Excepcional de la Añada 2017 lo integraron Caroline Wästersved, del ABaC Restaurant (tres estrellas Michelin); Miguel Martín y Ángel Fernández, de DiverXo, propiedad del mediático Dabiz Muñoz (tres estrellas); Rubén Pol, del restaurante Disfrutar (dos); Noemí Martínez, del Trigo, en Valladolid, que obtuvo una estrella en la última calificación; Álvaro Prieto, del Club Allard (dos estrellas); Elsa Gutiérrez, de Annua (dos); e Iván del Pozo, de Baluarte, de Soria, con una estrella Michelin.
Como portavoces del comité de calificación ejercieron Elsa Gutiérrez, de Annua (dos estrellas Michelin) y Miguel Martín, de DiverXo, propiedad del mediático Dabiz Muñoz (tres estrellas). Así, la primera de ellas desveló que ella fue partidaria de que la añada hubiera tenido la calificación de “excelente” si bien subrayó que “va a sorprender muchísimo”. También recordó la importancia de que este año la producción haya pasado de recoger más de 100.000 kilos a los 55.000 kilos de uva.
Por su parte, Miguel Martín fue partidario de la calificación de ‘Muy buena’ a pesar de que, según reconoció, “tiene cualidades de excelente”. Preguntado acerca de lo que, a su juicio, le falta al vino de 2017 para obtener la calificación de excelente apuntó: “Para ser excelente me ha faltado un poco más de fruta; simplemente ha sido eso”.
El presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Ribera del Duero declaró que “se ha pasado de un pesimismo absoluto a un optimismo” y que la cosecha de 2017 tiene muchas cualidades y se va a demostrar con el tiempo”. “El pesimismo era muy grande en Ribera del Duero y se fue viendo la luz hasta el resultado, que es de un gran vino”, manifestó.
