El Memorial del cementerio San Carlos Borromeo de Salamanca ha acogido este sábado un acto de homenaje a la figura del poeta Miguel Hernández como celebración de recuerdo a la proclamación de la II República.
Como es tradicional, la Asociación Memoria y Justicia de Salamanca ha conmemorado un año más este hecho histórico, dando protagonismo al poeta en el 76 aniversario de su fallecimiento.
Luis Calvo perdió a su padre cuando tenía tan solo seis años. La causa fue el fusilamiento por, según dijeron, adhesión a la rebelión. Calvo puntualizó, no obstante, que “el más tonto se debe dar cuenta de que los rebeldes fueron ellos”. Para recordar este día y rememorar a “aquellas personas que, desgraciadamente, fueron asesinadas por la horda franquista”, como afirmó, se realiza este acto, en el que fue el encargado de decir unas palabras acerca de Miguel Hernández.
Miguel Hernández fue descrito como un “hombre sencillo, del pueblo”, así como un “hombre merecedor” del elogio y reconocimiento público. Luis Calvo quiso destacar que “fue arrebatada su vida por defender la libertad”.
En el acto se hizo hincapié en la relación de Hernández con la mujer. En un texto que se leyó ante todos los asistentes, se expuso que el poeta defendió todo en lo que creía a través de su obra, que se convierte en una “declaración de sus valores más fundamentales”.
Como ejemplo de mujeres tuvo a su madre, sus dos hermanas, su esposa y todas aquellas artistas que conoció y admiró. Gracias a esto desarrolló una visión de igualdad social, pionera en su tiempo. Varios de sus poemas resaltan el papel de la mujer.
Posteriormente, se hizo una ofrenda floral con un ramo tricolor y se pasó a la lectura de diversos poemas del literato.