El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, afirmó este martes que la Administración autonómica tratará de “explicar” al Gobierno de España que “tenga en cuenta el coste diferencial” en la prestación de servicios públicos fundamentales a la hora de definir un nuevo modelo de financiación. “Sería injusto valorar los servicios públicos universales con los mismos criterios con los que se valora el coste de prestación de esos servicios en una gran capital como Madrid o con comunidades autónomas que no tienen esa diseminación de pueblos que tenemos”, indicó.
Herrera Campo, quien hizo estas declaraciones antes de visitar las nuevas instalaciones del Hospital Provincial de Zamora, se refirió a la polémica generada en torno a la relajación, en determinadas circunstancias, de la normativa que exigía, al menos, cuatro alumnos, para mantener abiertas unidades educativas en Castilla y León, según anunció la semana pasada el consejero de Educación, Fernando Rey, en Alcañices (Zamora).
“Se considera que, en algunos casos, y no hay ninguna decisión adoptada, que se puedan mantener donde haya expectativas de crecimiento y haya tres menores que puedan ser educados lo más cerca posible de sus hogares”, señaló. “Es interesante, por lo menos, considerarlo. Respeto las polémicas, pero no son polémicas que puedan dar argumentos convincentes frente a lo que puede ser un mayor esfuerzo todavía para asegurar a las familias que cuenten con comunidades educativas”, añadió.
Juan Vicente Herrera hizo hincapié en que, para mantener esas unidades educativas, hace falta “un esfuerzo adicional de recursos públicos”, aspecto que recordó que “intentaremos explicar” al Gobierno de España y que “queremos compartir con otras comunidades que tienen esa misma pulsión de defensa del territorio”.
El presidente de la Junta incidió en que la Administración autonómica quiere “coadyuvar y ayudar” a afrontar “entre todos” el “grave problema” de las despoblación, “especialmente sentido” en provincias como Zamora. “Por eso venimos haciendo en los últimos años un esfuerzo que nadie ha reprochado -algunas personas no lo habrán valorado pero nadie lo ha criticado- de mantener unidades educativas donde, al menos, éramos capaces de concentrar cuatro niños y, a su vez, esa unidad educativa garantizase la sociabilidad de los niños y se integrase con los instrumentos que son los colegios rurales agrupados”, comentó.
