Ante el bloqueo del convenio colectivo regional de los trabajadores del sector de ayuda a domicilio, los afectados han iniciado este jueves movilizaciones de protesta.
Concretamente, con sendas concentraciones ante la Diputación Provincial y el Ayuntamiento, que son quienes licitan estos servicios públicos para que los preste una empresa privada, en este caso Azvase.
Después de tres reuniones, los sindicatos afirman que la patronal «no mueve su postura» y ofrece unas condiciones que implicarían la pérdida de derechos laborales y retribuidos.
En concreto, perderían la subida salarial de 2017 y este año no se les subiría ni el IPC. También perderían el derecho a tres días por enfermedad y les fijan el plus de desplazamiento en tres euros, cuando tienen que andar de una casa a otra toda la jornada y con eso no les alcanza.
Si las cosas siguen así los trabajadores irán al servicio de mediación laboral para intentar desbloquear la situación, y si no es posible, convocarán huelga en dos días por señalar en junio, aunque todo apunta a que serán el 18 y el26.
En la actualidad, hay 566 trabajadoras (en su gran mayoría) de ayuda a domicilio en Salamanca, de las que 186 trabajan en la capital y las 380 restantes en los pueblos con cargo a la Diputación que paga a Azvase.
Como el Ayuntamiento y la Diputación son los que han adjudicado este servicio a Azvase, los trabajadores se concentraron este jueves ante ambas instituciones para hacer ver su situación y criticar que «las empresas que concurren a este servicio reducen la calidad que recibe el usuario y los derechos de los trabajadores».
Las trabajadoras piden «dignificar esta labor y no seguir en la situación de precariedad laboral que las deja indefensas ante la voracidad del mercado».