El precio de la gasolina ha ascendido un 2% en el mes de mayo con respecto al año anterior, según los datos del INE con relación al IPC. La tasa de inflación interanual, que en abril era de 1,1%, se ha disparado nueve décimas, lo que supone la mayor subida de mayo desde hace más de una década.
“Destaca la subida de los carburantes frente a la bajada que experimentaron en 2017 y también el aumento de los precios de la electricidad”, han señalado desde el Instituto Nacional de Estadística. El aumento del precio del barril de petróleo, que ahora es de 80 dólares, ha hecho que los precios de la gasolina se disparen.
Además, la OCU ha advertido que la factura de mayo será cuatro euros más cara debido al crecimiento del 10% del precio del kWh en la tarifa regulada.
Se espera una inflación del 1,6% este año, algo que el Gobierno ha trasladado a los PGE para revalorizar las pensiones. El mes de marzo, el último que presenta cifras de empleo, los convenios colectivos ya mostraban un alza salarial media del 1,56%. Sin embargo, esta última subida de los carburantes pone en duda que los precios vayan a dejar de ascender.
Luis María Linda, gobernador del Banco de España, ha manifestado que “la volatilidad en este mercado introduce incertidumbre adicional sobre los precios y, en cualquier caso, para los componentes más estables de la inflación (excluyendo la energía), se anticipa un repunte paulatino”.
Se esperaba que el crecimiento económico fuera el que elevase los precios de forma natural, pero el incremento del valor del petróleo ha causado una inflación que podría desbocarse por encima de lo esperado.
