[dropcap]N[/dropcap]os gusta ver leer a nuestros clientes, porque es parte de nuestra filosofía. No queremos ser una librería que simplemente sea el reflejo de un negocio en sí, sino un espacio donde las personas puedan acudir, relajarse, leer, tomarse un café y disfrutar de la cultura», explica Alberto Gómez, de la librería Santos Ochoa.
Es muy normal que se acerquen personas que en estos momentos no saben qué leer, andan perdidas de novedades o tampoco le llama nada la atención y en Santos Ochoa siempre preguntan qué es lo último que ha leído o las últimas referencias para tener una guía. «Tenemos muchas sugerencias, desde nuestras revistas trimestrales, hasta las recomendaciones particulares de la librería que suelen encontrarse en el rincón del librero, donde está la cafetería. Tenemos otro con las recomendaciones generales de Santos Ochoa», apunta Gómez.
¿Qué importancia le dan en Santos Ochoa a las pequeñas editoriales?
Máxima. Una pequeña editorial publica joyas que tienen un público más grande de lo que creemos. Hay lectores buenísimos que buscan lecturas nuevas y, curiosamente, las pequeñas editoriales suelen tener este tipo de libros. Apoyar a las pequeñas editoriales es positivo porque en esto estamos todos. Todos formamos parte de lo mismo y eso significa que crecemos.
El encuentro de los escritores con sus lectores es otra de las señas de identidad de Santos Ochoa. ¿el motivo? Es una experiencia muy importante, porque el lector tiene una relación directa con el escritor que le gusta, puede hablar con él y preguntarle dudas o curiosidades. «Nos encanta. No nos cerramos a ninguna propuesta e intentamos llenar nuestra agenda. Para nosotros es muy importante tener la librería llena de actividad, que esté viva, porque más allá de las presentaciones hacemos talleres, microconciertos, obras de teatro, queremos seguir teniendo actividades diferentes,… todas dirigidas al público lector».
En esta línea, ¿cuáles son sus próximos proyectos?
Tenemos pensado algo relacionado con el deporte, de hábitos saludables, de ejercicios o comida. Estamos programando un proyecto de un libro para saber comer, con dietas y demás. Queremos tener un abanico muy amplio para que todo el mundo sienta que esta librería es suya.
Santos Ochoa es una librería abierta, con pequeños rincones de lectura, es un estándar de esta empresa que nació en Logroño hace 103 años. Ha crecido a lo largo de este centenario y se ha adaptado al devenir de los tiempos y de los gustos de los lectores.
Psicología, Salud, Espiritualidad,… y hay un rincón que tiene nexos de unión entre las secciones para que la persona que se acerca a Santos Ochoa pueda moverse de la forma más intuitiva posible sin que llegue una persona a decirle: ‘Para cualquier cosa que necesiten estamos aquí’. «Los lectores ya lo saben. Nuestro lema es: ‘Estamos para ayudarte’, pero sin agobiar. La idea es que la persona que entre aquí toque, ojee, se siente, lea, uno, dos, tres, cuatro días,… los que quiera y este relajado», explican y dicen que aceptan «sugerencias».
¿Qué nos perdemos si no leemos?
Lo más importante: Aprender. En esta vida estamos para aprender. Si no lees te pierdes una parte importante de la evolución. No sólo es experiencia, que también, pero a través de los libros también experimentas. El libro es compartir experiencias relatadas, narradas y vivencia, imaginarias o no, siempre hay algo real en las historias que leemos. Sinceramente, creo que nos perdemos evolucionar.
¿Se lee más que antes? (Al menos en una pantalla de móvil o tablet)
Gracias a nuevas tendencias como la editorial Mueve tu Lengua, donde se publican libros de poesía hechos por cantantes, artistas,… fomentan la lectura. Creo que es muy positivo, porque es leer, es enganchar a la lectura y promover la cultura. Todo lo que hagas para fomentar la lectura, es fantástico. ¿Si se lee más ahora? Creo que se lee diferente. Hay lectores de siempre, otros que se enganchan por la televisión, por recomendaciones o por las nuevas editoriales,… Todo es bueno. No creo que se lea más que antes o menos, creo que se lee diferente en cuanto a formatos y estilos.
¿Cómo es el librero del siglo XXI?
Un librero no es un vendedor de libros. Tiene que haber una pasión por la lectura. No estamos en un supermercado. Muchas personas vienen a una librería a que nosotros le recomendemos una experiencia, no vienen a que le ofrezcamos un artículo que contiene 250 páginas y quieran tenerlo en su casa. Un libro no es un objeto al uso, porque te ofrece una experiencia que te va a mover emociones. El librero tiene que conocer esas experiencias. Evidentemente, cada librero es un mundo. Lo que me gusta a mí va a diferir del compañero. Eso es lo bueno de los libreros que tenemos aquí, que a cada uno nos puede gustar un estilo y nos podemos adecuar al perfil de los clientes que se acercan.
Información:
Librería Santos Ochoa
Gran Vía, 12.
Plaza España, 3