Fuerzas del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Burgos inmovilizaron una ambulancia y denunciaron a su conductora, al arrojar resultado positivo en el test de drogas practicado con motivo de un punto eventual de verificación de alcohol y drogas, realizado días atrás, según informaron hoy fuentes del instituto armado.
ICAL. Los hechos ocurrieron cuando una Patrulla del Subsector de Tráfico de Burgos daba la señal de alto y parada a una ambulancia que circulaba por la carretera N-234, con motivo de un dispositivo preventivo desarrollado para realizar las pruebas de alcoholemia y drogas. Eran las 8.30 horas y el transporte, que había salido desde Soria con varios pacientes, se trasladaba al Hospital Universitario de Burgos (HUBU). Identificada su conductora, se realizó la prueba de alcoholemia arrojando resultado negativo.
A continuación, se practicó el test de drogas, comprobándose que este era positivo en al menos dos sustancias, como más tarde confirmaba la analítica realizada por el laboratorio autorizado, en anfetaminas y tetrahidrocannabinol (THC, que es el principal constituyente activo de la marihuana). El vehículo fue inmovilizado a la vez que se gestionaba la presencia de otra ambulancia con otro conductor, al objeto de que los pacientes pudieran continuar ruta y ser trasladados hasta su destino.
La mujer se enfrenta a una denuncia administrativa y con ello a una posible sanción económica de 1.000 euros y la detracción de seis puntos de su permiso de conducción. Este tipo de controles preventivos que se practican diariamente en las carreteras de la provincia están dirigidos a mantener y preservar la seguridad vial.