El preso está condenado a 138 años y cumplía condena en Mansilla de las Mulas
ICAL. Santiago Izquierdo Trancho, uno de los presos más peligrosos de España, aprovechó un permiso penitenciario para fugarse de la prisión de Mansilla de las Mulas (León), en la que cumplía condena. El reo, condenado a 138 años, no se presentó el pasado lunes en el centro de inserción social Jesús Haddad Blanco de la capital leonesa, a dónde debía acudir por sus propios medios desde el centro penitenciario. Los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado ya han abierto una investigación para tratar de dar con su paradero.
Izquierdo Trancho ingresó por primera vez en prisión en mayo de 1985 acusado de asesinato. Ya en la cárcel habría sumado a su historial delictivo el asesinato de un compañero recluso, así como otros delitos como el secuestro de funcionarios, el desacato, la agresión, las amenazas o el robo. El fugado fue también uno de los líderes del motín que en 1991 sufrió la cárcel de Herrera de la Mancha (Ciudad Real) y ha protagonizado numerosos intentos de fuga.
“Hace unos años fue un interno conflictivo”, reconoció Cartón, que aseguró, en cambio, que Izquierdo “tenía buen comportamiento en la última época”. En la actualidad y tras haber cumplido las penas más largas a las que había sido sentenciado, el interno cumplía una condena de tres años y ocho meses, explicó el secretario autonómico de Acaip, que recordó que el “mandato constitucional” de los cuerpos de la administración de Instituciones Penitenciarias consiste en “rehabilitar y reinsertar a los internos para que vuelvan a la vida en comunidad”.
En ese sentido, puntualizó que la orden de que el preso transitase del centro penitenciario de Mansilla al CIS de León vino dada por el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria, que fue el que estableció las condiciones para su desplazamiento. “El permiso no fue concedido por el propio centro”, remarcó Cartón, que subrayó su respeto “siempre” por las decisiones judiciales.