Este domingo comenzó la era de Pedro Sánchez como nuevo secretario general del PSOE en sustitución de Alfredo Pérez Rubalcaba. El congreso federal extraordinario también eligió a la nueva comisión ejecutiva, que integra a doce barones del partido.
En su discurso ante los delegados que han participado en el congreso extraordinario, Sánchez hizo un guiño a la izquierda para tratar de recuperar la confianza del electorado socialista. Lo primero que deben hacer, dijo, es «cumplir lo que prometemos».
Sánchez se comprometió a derogar la reforma del aborto, la reforma laboral y a denunciar el concordato con el Vaticano. Una búsqueda del voto perdido que ha caído en manos del PP y del «populismo» de Podemos sin referirse a ellos explícitamente.
Nueva dirección
El nuevo líder del socialismo español consiguió sacar adelante su comisión ejecutiva con el apoyo del 86 por ciento de los delegados, y algunas críticas contra la racanería a la hora de integrar a las otras dos sensibilidades (Madina e Izquierda Socialista) que compitieron con él en la carrera por la secretaría general.
La nueva dirección del partido integra a doce barones regionales. La andaluza Micaela Navarro es la nueva presidenta del PSOE. Pedro Sánchez es el secretario general y César Luena el secretario de Organización.
Algunas ideas esgrimidas por Pedro Sánchez en su discurso ante los delegados al congreso extraordinario:
Sin complejos: «Todo lo bueno que la he pasado a España ha venido de la mano de los gobiernos socialistas»
Objetivo: «La defensa de la clase media y trabajadora».
Bancos: Se mostró contrario a «malvenderlos» y de recuperar el dinero público que el Gobierno del PP les ha prestado.
Corrupción: «Si el PP quiere regeneración democrática, que coja la escoba y limpie su casa».
Reforma de la Constitución: «La única vía para garantizar la convivencia es la España Federal».