Cerca de 1.500 personas de las localidades de Retortillo, Villavieja de Yeltes, La Fuente de San Esteban y Ciudad Rodrigo han mostrado su apoyo al proyecto minero de Berkeley en Salamanca. “Los ciudadanos locales se han posicionado a favor de la mina, destacando el impacto del proyecto en términos de empleo y considerándola la única alternativa para evitar la temida despoblación que afecta al área, ya que el proyecto permitiría a los jóvenes permanecer en la región”, indica Berkeley.
La empresa afirma que el apoyo entre la comunidad local es “muy significativo, ya que toda la población de Retortillo y la mitad de los residentes permanentes de Villavieja han firmado a favor”.
En los últimos meses, la compañía ha organizado distintos eventos para dar voz a los ciudadanos que están a favor del proyecto. El pasado viernes, más de 300 personas asistieron a una comida popular organizada por la compañía y disfrutaron de la llegada de la Vuelta Ciclista a Salamanca a Retortillo vistiendo camisetas con mensajes de apoyo a la mina.
Francisco Bellón Vice Presidente de Berkeley Minera, ha comentado que “el increíble apoyo de los ciudadanos locales que se beneficiarán directamente de la mina sigue de algún modo al evento celebrado en el Colegio Mayor Arzobispo Fonseca en el que más de 200 empresarios salmantinos mostraron su apoyo al proyecto”.
Añadió que “las firmas de las ciudades y pueblos cercanos aún están llegando y esperamos que la cifra siga aumentando, ya que cada vez más gente está expresando su apoyo a la mina, haciendo bien patente que la oposición nada tiene que ver con el interés local, y nada ofrece como alternativa para desarrollar la comarca”.
El proyecto
El proyecto de explotación de la mina de uranio de Retortillo tendrá, según la empresa, unos efectos “muy notables en el desarrollo social y económico del conjunto del Campo Charro en particular, y para la provincia de Salamanca y España en general. La inversión de 250 millones de euros de Berkeley Minera es una de las mayores inversiones jamás realizadas en la provincia de Salamanca, que ha visto a más de 120.000 personas abandonar la región en los últimos cinco años”.
La inversión “creará 2.500 puestos de empleos directos e indirectos y ayudará a rejuvenecer la comunidad local, que está sufriendo un grave problema de desempleo a largo plazo especialmente entre los más jóvenes. Es importante destacar que esta es una zona muy afectada por la despoblación ya que, según el Instituto Nacional de Estadística (INE), 290 de los 362 municipios que componen la provincia de Salamanca han registrado una media de diez o menos nacimientos en los últimos cinco años”.
En este sentido, los ciudadanos se han mostrado convencidos del impacto positivo que el proyecto minero generaría en la región, valorando muy positivamente la creación de empleo y la dinamización del desarrollo local tanto a nivel social como económico.
La compañía ha recibido más de 23.000 solicitudes de empleo y espera cubrir hasta 400 vacantes, entre titulados superiores y de grado medio (ingenieros/as de minas, industriales, informáticos, geólogos físicos y químicos) y técnicos y operarios de maquinaria minera. Las contrataciones se irán materializando a medida que se vaya avanzando en las distintas fases del proyecto.
La mayoría de las personas que actualmente trabajan en el proyecto proceden de la zona en la que está ubicado el yacimiento (Retortillo y Villavieja de Yeltes) y más de la mitad de éstas son mujeres. Desde el inicio, la compañía ha mostrado su compromiso en desarrollar una política de contratación que favorezca la empleabilidad de los residentes del Campo Charro, una zona que se ha visto fuertemente afectada por el desempleo en los últimos años, especialmente entre el segmento de población joven.