La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, señáló hoy que tanto la administración estatal como la autonómica «van de la mano» en la interlocución «al máximo nivel» con directivos de Vestas Eólica para tratar de evitar la anunciada marcha de esta empresa de Villadangos del Páramo, en León.
ICAL. Así lo puso de manifiesto este sábado en Vinuesa, Soria donde recordó que el lunes, 3 de septiembre, habrá «una reunión importante» en el Ministerio de Transición Ecológica a la que asistirá su titular, Teresa Ribera.
«Se trata de una estrategia pactada por el Gobierno y la Junta porque aquí vamos todos de la mano», insistió, al tiempo que añadió que también se tiene el apoyo de los parlamentarios nacionales de la Comunidad «para llevar a las administraciones uno de los mayores problemas que tiene ahora la provincia León, ya que si llega a materializarse el cierre de Vestas sería gravísimo».
Barcones afirmó que todas las instituciones han sumado esfuerzos desde el primer momento «para apoyar a los trabajadores, estando a su lado y el de la provincia leonesa, y concretó que se ha puesto a su disposición «todos los instrumentos que las administración tiene para evitar que se deslocalice la producción». Por ello, pidió que se espere al resultado que se pueda producir en la reunión del lunes y las medidas que se puedan adoptar en el futuro.
«Con las ayudas recibidas Vestas tenía un compromiso de mantener la actividad un tiempo y, transcurrido un brevísimo periodo después de que concluyera el plazo previsto de obligación de permanencia, es cuando se anunciado la decisión de cerrar la planta de Villadangos del Páramo, en León. Estas prácticas no concuerdan con lo que debe exigirse social y moralmente a las empresas y confío en que todo se pueda solucionar finalmente», explicó la delegada del Gobierno.