La Ertzaintza ha encontrado el cuerpo momificado de una mujer ucraniana, desaparecida hace ocho años.
Ese es el tiempo que la mujer, que ahora tendría 65 años, llevaba muerta sobre su cama sin que nadie se diera cuenta. Ahora ha sido un hermano suyo quien envió un mail a la policía vasca diciendo que llevaba tiempo sin saber de ella.
Los bomberos accedieron a la vivienda y encontraron el cuerpo momificado de la mujer tendido en la cama, sin síntomas de violencia.
En 2013 los vecinos denunciaron a las autoridades el fortísimo olor que se desprendía desde el interior de la vivienda. «Vinieron los policías, tocaron el timbre y poco más», comentó un vecino. En la libreta bancaria de la mujer había dinero, y los recibos se iban pagando, lo que hizo que no se levantara ninguna sospecha.
