José María Álvarez, secretario general de UGT, ha visitado Salamanca este martes con motivo de la firma del convenio entre la Universidad de Salamanca y la organización sindical. El líder sindical ha aprovechado la comparecencia pública para hablar sobre otros temas de actualidad como la reforma del sistema de pensiones o los Presupuestos Generales del Estado.
La Seguridad Social ha puesto un plazo de 10 años del sostenimiento del sistema de pensiones. Se habla, por tanto, de una reforma en la financiación del mismo y parece que hay voces discordantes dentro del Gobierno.
José María Álvarez ha señalado a este respecto que «a mí me parece que el secretario de Estado, si no le interesa la política que marca la ministra, pues… Creo que debería hacer un pensamiento. Encuentro un poco difícil de entender que la ministra diga una cosa y el secretario de Estado parece que no dice exactamente la misma».
Con respecto a la materia en sí, afirmó que «reclamamos a este Gobierno que volvamos al Pacto de Toledo». «Hay que derogar la reforma del PP que eliminó la revalorización automática de las pensiones y que introdujo el factor de sostenibilidad que se iba a aplicar el 2019, que ahora se va a aplicar el 2023, y que quiere decir, sencillamente, que de aquí al 2050 van a rebajar la pensión 30 puntos», explicó.
«Ahora cobramos el 81%, más o menos, del salario a la hora de jubilarnos. La propuesta del factor de sostenibilidad es que hacia el 2050 cobraremos el 51% del salario de aquel momento», añadió a la explicación anterior.
En su opinión, «la Seguridad Social es viable; no tiene un problema de gastos, tiene un problema de ingresos». «Lo que hay que hacer es recaudar más», subrayó, «¿Cómo se recauda más? Destapando la cotización máxima que se debe de hacer. Nosotros estamos en torno a 45.000 euros, Francia está en más de 100.000 euros, eso puede darnos más de 7.000 millones de euros más de recaudación».
Además, considera que «la Seguridad Social no tiene por qué pagar los costes que no le son propios». Hay un total de «21.000 millones de euros que paga la SS y que deberían de pagar los PGE». El líder sindical habló también de medidas como la subida de los salarios o acabar con el fraude fiscal.
«Hay todo un margen de negociación y posibilidades para que se puedan subir las pensiones», añadió, «y a la vez mantener el sistema. En ese marco pueden encontrarnos a los sindicatos para negociar. En otro marco, que no nos busquen porque no estaremos».
Hablando de negociaciones, UGT se encuentra en ese trámite con Esquerra Republicana para que sacar adelante los PGE. El secretario general manifestó que «la UGT está convencida de que este país necesita unos PGE que nos devuelvan derechos», tanto laborales como sociales.
«Creo que hay que apoyar esa negociación», subrayó, «creo que es bueno que UP, Esquerra Republicana y los demás partidos que dieron el Gobierno a Sánchez aprieten para que eso se vea reflejado en una Ley de Presupuestos que recoja todas estas y más cuestiones. Nosotros vamos a exigir a todas las fuerzas políticas que no tengan excusas y que apoyen y que aporten en este proceso, porque sabemos que nos jugamos el futuro de muchas familias».
Para el líder sindical, los Presupuestos Generales del Estado serán la prueba de fuego del Gobierno socialista. «Sánchez tiene una prueba muy importante en la elaboración de estos PGE», destacó, «en estos momentos, los intereses que nosotros representamos dependen del éxito del Gobierno, pero, sobre todo, de ese grupo de partidos políticos que llevó al señor Sánchez al Gobierno».
«A los que no quieren que se cambie nada, a los que quieren que se consolide este reparto desigual de la riqueza, que querrían que la reforma laboral se constituya en la ley futura de las relaciones laborales, que querrían que se continúe manteniendo la cercenación del derecho de huelga o la Ley Mordaza, les gustaría que el Gobierno de Sánchez fracasara. A los que creemos que son necesarios estos cambios, nos gustaría que esta experiencia de izquierdas tenga éxito».