[dropcap]L[/dropcap]a Federación de Vecinos de Salamanca y Provincia (FEVESA) quiere manifestar su pena y dolor por la muerte de nuestra compañera Pepita Mena Martín. Su fallecimiento en el día de hoy priva a esta ciudad de una de las personas más activas y comprometidas del movimiento vecinal desde sus inicios, hace ya más de 40 años.
Pepita fue una de las fundadoras del movimiento vecinal de Salamanca. Era una de las personas más queridas de su barrio, San José, donde organizó a sus vecinos, y muy especialmente a sus vecinas a través del Grupo de Mujeres, para combatir la injusticia y reclamar servicios en igualdad de condiciones con el resto de la ciudad. Fue también una de las impulsoras del servicio de planificación familiar en la ciudad de Salamanca.
Siempre estaba atenta a todo lo que acontecía en su barrio, constituyendo un referente y una esperanza para una de las zonas más humildes de la capital. Cuando cerraron la Biblioteca de Caja Duero en el cercano barrio de El Tormes, apoyó la apertura de la Biblioteca Popular Giner de los Ríos y colaboró en su puesta en marcha.
Perteneció durante muchos años a la Junta Directiva de FEVESA dirigida por Chema Collados, luchando contra la subida de impuestos, del autobús, del agua y de la luz. Defendió la permanencia y mejora de las conexiones ferroviarias de Salamanca con otros lugares de España, tan importantes para el futuro de todos nosotros, llegándose a encadenar a las vías del tren junto a otros compañeros en señal de protesta.
Así mismo, acompañó a la población de Las Arribes en su lucha contra el cierre de las urgencias médicas y trabajó activamente contra la supresión de médicos en la zona de Brincones.
Fuera de la provincia de Salamanca, el movimiento vecinal de Castilla y León también va a extrañar, entre otras muchas actividades, su participación año tras año en la festividad de Villalar.
Pepita fue una mujer incansable, que nunca dio un paso atrás en defensa de los discriminados y contra los poderosos. Se enfrentaba una y otra vez a las instituciones, con el máximo respeto y la mayor de las determinaciones, buscando siempre una solución justa para la ciudadanía. Lo hizo como Vecina, como Senadora y como Concejala del Ayuntamiento de Salamanca. Detrás de todas esas etiquetas siempre estaba la misma Pepita Mena, la que inspiraba al movimiento vecinal de nuestra ciudad.
Esta es una de las notas más duras que hemos tenido que escribir desde FEVESA, que se suma tristemente a otras dolorosas despedidas recientes de compañeros y compañeras que dieron lo mejor de sí mismos en el movimiento vecinal de esta ciudad.
Gracias por todos estos años de esfuerzo y dedicación, de consejos y sonrisas, de empuje e iniciativa, de solidaridad y cariño incondicional. Tu recuerdo nos acompaña y deja una huella imborrable en la ciudad de Salamanca.
Que la tierra te sea leve.
FEVESA
