[dropcap]G[/dropcap]racias ha sido la palabra más escuchada en la inauguración de la XXIII edición del rastrillo del Comedor de los Pobres, ubicado en la Purísima.
Palabra que ha pronunciado la concejala Cristina Klimowitz, quién ha valorado el esfuerzo de los voluntarios y su labor continua y callada. Palabra que también ha verbalizado Bienvenido Mena, delegado Territorial de la Junta de Castilla y León, señalando a las personas que dedican su tiempo a los demás. «Nosotros debemos aprender de ellas».
Agradecimiento al vicario de la Purísima, Poli Díaz, quien a su vez ha señalado que «hay que hacer lo que se pueda por los desfavorecidos».
Y también se ha reconocido la labor de los donantes, ya que todos los objetos que se pueden adquirir en el rastrillo del Comedor de los Pobres hasta el día 16, han sido regalados por los salmantinos.
Además de objetos, productos de alimentación como embutidos y quesos, se puede tomar un café, ya que se ha habilitado un espacio para una ‘cafetería solidaria’
En números
Actualmente, el Comedor de los Pobres atiende a unas 200 familias sin recursos. Además de los 30 sin techo que acuden a comer diariamente.
En Nochebuena se hará una cena estupenda a la que previsiblemente acudirá el obispo Carlos López y un centenar de personas, entre ellas familias que acompañarán a estas personas desfavorecidas.
