Este miércoles se han vivido momentos de tensión en El Campillo, cuando los vecinos del pueblo han increpado al asesino confeso de la joven Laura Luelmo, cuando fue conducido por la Guardia Civil de Huelva para la reconstrucción de los hechos.
Bernardo Montoya llegó a las 13:30 horas entre gritos de «asesino» y «todos somos Laura» por parte de un grupo de vecinos que le estaban esperando y que llegaron a saltarse el cordón policial, yendo a por él, pero fueron contenidos por los agentes de la Guardia Civil.
La casa está situada casi en frente de la que alquiló Laura en el pueblo a una compañera de trabajo.
En su declaración ante la Benemérita ha dicho que la joven le preguntó por un supermercado, la engañó y la mandó a un callejón sin salida, donde la agarró, golpeó y dejó inconsciente.
Posteriormente, según su versión, metió a Laura en el maletero del coche y la trasladó hasta el lugar donde fue localizada.
Allí la desnudó e intentó violarla, pero no lo consiguió. Al parecer, Montoya también ha dicho a los agentes que estaba viva cuando la abandonó.
Sin embargo, la autopsia confirma el fuerte golpe en la frente y que existió violación.
? Momentos de tensión en El Campillo, en Huelva. Vecinos del pueblo rompen el cordón policial e intentan acceder al domicilio de Bernardo Montoya, asesino confeso de Laura Luelmo, quien se encuentra dentro con la Guardia Civil pic.twitter.com/Xfu7QEbSzY
— RTVE Noticias (@rtvenoticias) December 19, 2018