Por estas cosas que tiene internet, se ha reactivado el interés por un robot que facilita mucho una de las tareas más penosas del hogar: el planchado de la ropa.
El invento se presentó en 2017 en una feria tecnológica y ya se han encargado más de 8.000 unidades.
Cuesta 850 dólares y ocupa más o menos el espacio de una lavadora. Si afinan el invento seguro que arrasa.