El Consejo de Diálogo Social de Salamanca se reunió este jueves por primera vez desde que Carlos García accediera a la alcaldía que dejó vacanta la huida de Mañueco.
Y lo ha hecho sin cambios en su composición respecto a la que tenía en la anterior etapa, por lo que la nueva patronal, la Confederación de Empresarios de Salamanca (CES) sigue sin tener un asiento.
Algo que a sus responsables no les ha gustado. Consieran que sin su presencia esta instrumento constituido para impulsar la actividad económica y el empleo en Salamanca sigue “cojo e incompleto” porque «la organización empresarial más representativa de Salamanca sigue sin ser invitada a participar en él».
CES afirma que es la organización empresarial intersectorial más representativa de la provincia de Salamanca, puesto que cuenta con el respaldo de más de 2.200 empresas, entre ellas, las de las asociaciones de los principales sectores del tejido productivo de la ciudad (comercio y hostelería).
El presidente de CES, José Vicente Martín Galeano, denuncia «falta de sensibilidad por las partes integrantes y resalta que la mayoría de los empresarios y pymes salmantinos no están representados en la negociación del diálogo social, dado que se excluye de él al agente más importante del sector empresarial de Salamanca. Queremos hacer una ciudad y provincia competitiva con el esfuerzo de todos, y trasladar nuestras propuestas
para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos”, señala.
El Consejo del Diálogo Social, compuesta por el Ayuntamiento, la patronal Confaes y por los sindicatos CCOO y UGT.
Durante la reunión de este jueves se ha informado sobre las políticas de empleo del Ayuntamiento durante este mandato, dado cuenta del grado de ejecución del acuerdo firmado en mayo de 2018 sobre compromisos presupuestarios para dicho ejercicio, relativos a actuaciones relacionadas con el diálogo social en la ciudad, y propuesto la creación de una comisión de rehabilitación y regeneración urbana, como se comprometió durante su toma de posesión.
