Un ciudadano ruso llamado Vladimir acaba de dar la vuelta al mundo con un cuchillo clavado a la espalda y saliendo del hospital en esas circunstancias, para fumar un pitillo.
Los hechos ocurrieron este lunes en un hospital de la localidad rusa de Zelenodolsk, cuando este hombre ingresó tras recibir una puñalada por la espalda.
De hecho, llegó con el puñal clavado y los médicos lo desvistieron para conducirlo a cirugía.
Cuando estaba en la camilla se levantó y semidesnudo se dirigió dando tumbos (estaba ebrio) hasta la puerta porque quería fumar.
Solo cuando un médico le dijo que si regresaba moriría, aceptó volver adentro.
Tras el incidente fue operado y ahora se encuentra estable.
https://youtu.be/QuNpdTreMXc