[dropcap]E[/dropcap]ducación y concienciación sobre la violencia de género, como ocurrió con las muertes en accidentes de tráfico, cuando en los años 80′ morían unas 15.000 personas en las carreteras. Ahora, 1.000, que aún siendo muchas se ha reducido considerablemente su número. ¿Cómo se han evitado tantas muertes? Con campañas de publicidad diciéndonos que ponerse al volante era peligroso, invirtiendo en mejores carreteras, en educación,….
«Aquí también hay un problema muy serio de educación. Por eso, nosotros queríamos contar con la Universidad y la Junta de Castilla y León estaba representada. Hay que incidir desde pequeños en educación en valores, en igualdad. Todo esto tienen que ir calando en la sociedad, lo que pasa es que esto es más difícil que conducir bien, pero se puede hacer», explica José Ramón González Clavijo, presidente de la Audiencia Provincial, que este jueves se ha reunido con las asociaciones de víctimas de violencia de género, para invitarlas a que colaboren con la reciente constituida comisión de coordinación de la Audiencia Provincial en materia de violencia de género.
Hay cada vez más casos…
El número de muertes por violencia de género se mantiene desde 2004, entre 60 y 70 casos por año. Son las cifras que se barajaron cuando se estaba redactando el proyecto de Ley. Ya desde ese momento, puse de manifiesto que la respuesta judicial es útil, tienen que estar ahí, pero no es la que evita muertes. Nosotros los jueces ya vemos la muerte, las lesiones, el maltrato.
La respuesta adecuada es la primera parte de la Ley de Violencia de Género: Educación, publicidad, medidas sociales, amparar a las víctimas,… «Hay mucho campo aquí y es donde hay que poner inversión económica, medios, profesores, cursos, educación para la Ciudadanía, en Valores, llamémoslo como queramos. Solo por esa vía, educando se puede ir acabando. Va a ser largo y costoso, pero está ahí. Los jueces ya nos encontramos con la muerte, agresión, violación,… Y hay que dar una respuesta buena, eficiente, útil, pero no se ha prevenido», explica González Clavijo.
¿Sigue habiendo publicidad sexista y denigrante para la mujer?
Sí.
Y en las redes sociales…
Es un problema. Si en las redes sociales permitido todo y los jóvenes vean normal ese comportamiento porque está en las redes sociales, porque si éste lo hace y yo no lo hago, soy menos hombre, este tipo de comportamiento hay que luchar contra esto.
¿Hay personas que siguen pensando que a las mujeres no les pegan o no las maltratan?
Según las encuestas, sí. El problema está en que hay un porcentaje alto de niños y adolescentes que no cree en la igualdad, sigue con una actitud dominante, controlando el móvil de su chica, sigue considerando que un empujón no es nada, que un insulto no es nada,… hay un problema serio.
La comisión
La idea de la comisión es coordinar desde un punto de vista procesal y con la ley en la mano, respetando los principios y derechos procesales de todo el mundo, de la víctima y del acusado, y respetando la independencia absoluta de cada juez. «Nunca vamos a poder hablar de un caso concreto. Hay que ponderar los intereses en juego. En ese equilibrio. ¿Creemos a la víctima?, ¿no la creo? qué datos me aporta, qué prueba tengo,… ahí se adoptará una medida de alejamiento o no. Es muy complicado. Aunque se van estableciendo una serie de parámetros, pero también es verdad que no hay dos casos iguales. El juez, en función de cada caso, toma una decisión«, puntualiza González Clavijo.
Para el presidente de la Audiencia lo importante es que el sistema funcione molestando lo menos posible a víctimas, acusados,… Hay un problema de formación. «Lo que sí sería importante es que aquellos órganos judiciales que tienen un contacto más directo con los aspectos más íntimos y personales, los que más afectan a la dignidad del ser humano como son: familia, menores, violencia de género o vigilancia penitenciaria, ahí soy partidario de una especialización del juez».
El juzgado de violencia de género de Salamanca tiene competencias penales, porque no tiene volumen suficiente para ser solo de violencia de género. «El juez que viene a este órgano, viene de otros destinos, habría que buscar alguna fórmula, como ocurre cuando te vas al ámbito laboral o contencioso, te imponen una formación de tres meses en esto. Debería ocurrir lo mismo, cuando pides una plaza de estas características, que hay mucho en juego, deben dale una buena formación específica que abarca muchos campos. Formación en igualdad, psicologías,… «, matiza.
Comunicar lo que hacen…
Contar con los medios de comunicación es esencial, el que se difunda las actuaciones judiciales, que se vea que las cosas son serias, que confíen en nosotros. Muchas mujeres, que a raíz de determinadas sentencias que no quiero ni mencionar, tienen desafección hacía las instituciones judiciales y eso hay que recuperarlo. Decir que estamos ahí y que apoyamos con las debidas garantías procesales para la víctima y para el acusados. Nos debemos a una Constitución con unas reglas muy claras del juego. Hay que transmitir el mensaje de que confíen en nosotros, pero es verdad que para eso, tenemos que hacerlo bien. Es muy duro para las mujeres denunciar, dar la cara, por eso queremos contar con las asociaciones.
El 1 de marzo se constituyó la comisión de coordinación de la Audiencia Provincial en materia de violencia de género. Formada por cinco instituciones: Audiencia Provincial, Juzgados que llevan competencias de violencia de género, la fiscalía, con libertad de criterio si quiere incorporarse o no, la unidad de atención a las víctimas que depende de Justicia y los forenses.