La Junta de Castilla y León y la Universidad de Salamanca se unieron este martes en una ceremonia solemne, celebrada en el Paraninfo de las Escuelas Mayores del Estudio salmantino, en la que homenajearon a las víctimas del terrorismo en la Comunidad con un acto “obligado de memoria y reconocimiento”, dentro del marco de la celebración el lunes del Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo.
Por parte del Gobierno regional, acudieron los consejeros de Educación, Fernando Rey; Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones; y Sanidad, Antonio María Sáez, en representación del resto del Ejecutivo que se encontraba en Valladolid con motivo del pleno de toma de posesión del nuevo presidente de las Cortes regionales.
En su alocución, Rey afirmó que el acto de reconocimiento a las víctimas de hoy es “algo fundamental que nos debemos como sociedad” para que se sepa “cuál ha sido la verdad, porque con el paso del tiempo hay el riesgo de que se erosione la frontera entre lo verdadero y lo falso”, por lo que “es muy importante guardar una memoria histórica correcta de los hechos para asegurar una convivencia pacífica en el futuro”.
De cara a ese objetivo, el consejero de Educación reivindicó el programa ‘Testimonio directo de las víctimas del terrorismo en centros docentes’ que lleva a cabo la Junta de Castilla y León en las aulas, a través de una “serie de materiales y unidades didácticas” y, principalmente, con el testimonio de las víctimas que “impresiona mucho a nuestros escolares y es muy interesante desde el punto de vista formativo”.
Por ello, el balance realizado del consejero por el programa fue positivo porque “los escolares tienen una correcta intelección sobre la convivencia en España” y además se educan en “competencias cívicas”, comprendiendo que “hay ciertos límites que la convivencia no puede traspasar, como es la violencia, porque es algo intolerable y contrario a la raíz de la democracia, que precisamente es un sistema de diálogos donde la palabra es el centro”.
También reivindicó el papel de las víctimas el consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta, Juan Carlos Suárez-Quiñones, para quien el acto de hoy es “obligado de memoria, agradecimiento y recuerdo a aquellas personas que prestaron un servicio a nuestra sociedad y que lo pagaron con lo más preciado: el sufrimiento, la salud y la vida”.
Alertó Suárez-Quiñones de la posibilidad de que “dentro de esa normalidad de el no terrorismo, tendamos a matizar los recuerdos”, frente a lo que aseveró que hay que mantener “los recuerdos plenos y vivos” sobre lo que fue el terrorismo como mejor forma de honrar a las víctimas.
Por último, el consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Antonio María Sáez, señaló que el acto de hoy, así como el día de ayer, son acciones de “reconocimiento a las víctimas del terrorismo” como forma de “poner de manifiesto esa solidaridad y reconocimiento” de las instituciones y la sociedad hacia ellas.
Humanismo y memoria
Los tres consejeros estuvieron acompañados por el rector de la Universidad de Salamanca, Ricardo Rivero, quien calificó el acto de homenaje a las víctimas de terrorismo en Castilla y León, a las que la Junta condecoró por segunda vez, como una “oportunidad de reconocer y evocar la memoria, acompañar a las víctimas y tener siempre presente que no queremos que vuelva a ocurrir algo así”.
“Hay que estar del lado de las personas que han defendido los mejores valores de la democracia y el Estado de Derecho”, defendió Rivero, para quien a la vez hay que “condenar a quienes les atacaron en su día o a quienes, en algún momento, piensen en volver a hacerlo”.