El teniente Enrique Miguel de la Guardia Civil ha explicado en la mañana de este viernes junto a la subdelegada del gobierno en Salamanca, Encarnación Pérez, cómo se ha desarrollado la operación “ABRAXAS” contra el tráfico de armas.
Dicha operación ha sido ejecutada por el Grupo de Información de la Comandancia de la Guardia Civil de Salamanca y se han intervenido 121 armas de fuego que tenía un vecino de Béjar, algunas de las cuales estaban listas para ser usadas pero que no han sido comprobadas todavía por la Guardia Civil.
Se trata de un ciudadano español, residente en Béjar, del que los propios vecinos desconocían su actividad. El traficante, ahora en libertad tras pasar a disposición judicial, llevaba a cabo una intensa actividad de compraventa de armas y munición en todo el territorio nacional, llegando a preparar armas detonadoras para hacer fuego.
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Las armas incautadas son muy diversas, desde material de coleccionismo hasta armas muy modernas.
Hay armas de la Guerra de Cuba, de la II Guerra Mundial y de la Guerra Civil. “Un solo arma puede valer entre 20.000 y 30.000€”, apunta el teniente Enrique Miguel.
La investigación lleva abierta cinco años. A la hora de proceder al registro, que duró más de 7 horas, encontraron todas ellas en el domicilio del traficante.
Según apunta el teniente, se están examinando cada una de ellas por el servicio de criminalística para determinar cuáles de ellas están en un estado de poder ser usadas o de haber participado en algún delito. Las que puedan tener un uso legal se subastarán y las que no, se destruirán.
Al traficante se le atribuyen delitos de tenencia ilícita de armas y depósito ilícito de armas tanto por la cantidad incautada como por el hecho de tener armas dispuestas para abrir fuego. “Él iba vendiendo armas y munición para comprar más y cada vez tenía más cantidad”, afirma el teniente. Era autodidacta y contaba con conocimientos y contactos importantes y serios.
Se trata de un caso de gran complejidad, ya que el traficante ha llegado a emplear hasta siete apodos en sus contactos, los cuales no solo le llevaban a diversas ubicaciones nacionales, sino que incluso realizaba transacciones internacionales con individuos del ámbito del tráfico de armas.
Según señala el teniente, se trata de la mayor incautación que ha podido ver en Salamanca y en Castilla y León en lo que lleva en el cargo. El suceso por el que le han localizado ha sido por haber comprado un arma a una persona con antecedentes por tráfico de armas.
Asombro
Lo primero que Encarnación Pérez ha comentado en cuanto ha tenido conocimiento de la operación y de las armas incautadas ha sido: “Quiero felicitar a la Guardia Civil por esta operación, sin duda me siento asombrada por la cantidad de armas que hay aquí. Algo que solo he visto en las películas”, dijo.
- 17 armas de fuego largas, activas y legalizadas.
- 37 armas de fuego largas, inutilizadas y legalizadas.
- 30 armas de fuego largas ilegales (9 aptas para hacer fuego)
- 20 armas de fuego cortas, activas e ilegales.
- 17 armas de aire comprimido y detonadoras.
- 40 bayonetas y machetes.
- 1000 cartuchos metálicos, además de material y herramientas para la recarga de cartuchería.