COMPETITIVIDAD
Todos nosotros deseamos ser competitivos en nuestra actividad sea cual sea esta. Desde el punto de vista personal, profesional o empresarial, la competitividad se manifiesta por la capacidad que tengamos para contener la competencia y, sobre todo, para superarla. Pero, ¿cómo podemos conseguir esto?
La definición de estrategias para alcanzar los máximos niveles de diferenciación, enfocándolas en aquellas capacidades que consideremos más importantes, nos permitirán alcanzar nuestras expectativas. Optar por unas u otras ventajas competitivas, tales como conocimientos, proporcionar productos o servicios de más alta calidad, conseguir menores costes que los rivales, diseñar productos y servicios que aporten mayores rendimientos a nuestros clientes o colaboradores, disponer de mayor eficiencia organizativa, etc., conducirán a lograr nuestros objetivos y, por ende, ayudarán a mejorar y estar preparados ante cualquier variación en los mercados o sectores en los cuales nos desenvolvemos.
Son múltiples los atributos, virtudes, méritos, capacidades, atributos y ventajas disponibles para marcar las diferencias necesarias y establecer nuestras ventajas adaptándolas a los cambios que puedan producirse y, elegir de entre ellas las más adecuadas a nuestros valores, tácticas e intenciones no es fácil. Ser competitivo exige una constante lucha de mejora que nos conduzca a la excelencia.
La calidad, en su concepto más general (calidad total), ha de ser uno de los caminos que se debe considerar y que aporta herramientas suficientes para prosperar y ascender en la gestión y operatividad de la organización y satisfacción de nuestro entorno. Uno de los modelos más recomendable para ser utilizado en esta carrera de la competitividad es el establecido por la Fundación Europea para la Gestión de la Calidad (EFQM, siglas en inglés) que se basa en los siguientes conceptos: añadir valor para los clientes; crear un futuro sostenible; desarrollar la capacidad de la organización; aprovechar la creatividad y la innovación; liderar con visión, inspiración e integridad; gestionar con agilidad; alcanzar el éxito mediante el talento y actitud de las personas y mantener en el tiempo resultados sobresalientes.
Este modelo conecta perfectamente con lo anteriormente descrito.
“Las palabras favoritas de esta cultura son productividad, innovación y competitividad. Somos muy poderosos en técnica y muy ignorantes y faltos de sabiduría. El exceso de ciencia no está compensado por la manera de usarla”. (José Luis Sampedro)
COMPETITIVENESS
We all want to be competitive in our activity, whatever it is. From the personal, professional or business point of view, competitiveness is manifested by the ability we have to contain competition and, above all, to overcome it. But how can we achieve this?
The definition of strategies to reach the highest levels of differentiation, focusing on those capabilities that we consider most important, will allow us to reach our expectations. Opt for some or other competitive advantages, such as knowledge, provide products or services of higher quality, get lower costs than rivals, design products and services that provide higher returns to our customers or partners, have greater organizational efficiency, etc., will lead to achieve our objectives and, therefore, will help to improve and be prepared for any variation in the markets or sectors in which we operate.
There are many attributes, virtues, merits, abilities, attributes and advantages available to mark the necessary differences and establish our advantages adapting them to the changes that may occur and, choosing among them the most appropriate to our values, tactics and intentions is not easy. Being competitive requires a constant struggle for improvement that leads to excellence.
Quality, in its most general concept (total quality), must be one of the paths that must be considered and that provides sufficient tools to prosper and promote the management and operation of the organization and satisfaction of our environment. One of the most recommended models to be used in this race of competitiveness is the one established by the European Foundation for Quality Management (EFQM) that is based on the following concepts: add value for customers; create a sustainable future; develop the capacity of the organization; take advantage from creativity and innovation; lead with vision, inspiration and integrity; manage with agility; achieve success through talent and attitude of people and maintain outstanding results over time.
This model connects perfectly with the previously described.
“The favorite words of this culture are productivity, innovation and competitiveness. We are very powerful in technique and very ignorant and lacking in wisdom. The excess of science is not compensated by the way to use it”. (José Luis Sampedro)
Antonio González Losa
