[dropcap]H[/dropcap]oy te escribo más sobre la filosofía, bases y fundamentos del Yoga.
En esta ocasión: Pranayama. Prana: energía vital. Ayama: expansión. En los Yogasutras, el señor Patanjali tuvo la amabilidad y el detalle de sentarse a recopilar y sistematizar todo esto del yoga en 8 ramas. Entre las cuales la cuarta rama es pranayama.
Al principio, leer todas estas palabras te puede parecer un pelín raro, pero te aseguro que te sumerges en un mundo yogui divertido y rico.
Vamos al lío. Esta rama viene después de asana, que ya conoces: las posturas. Una vez que dominamos esa parte, entra en el juego el pranayama. Son técnicas de respiración.
Hay que ser cuidadosos con esta rama ya que intervienen en ella tus fosas nasales, tus pulmones, los músculos que actúan en tu respiración… Un sin fin de cositas.
Así que presta atención y déjate llevar. Con pranayama conseguimos que las respiraciones sean cada vez más lentas, más profundas y más “entonadas” con un ritmo. No es respirar por respirar. Lo hacemos con el arte de la respiración, precioso ese ser artista de esto.
Pranayama va mucho más allá de respirar, ya que el cuerpo es tan listo que lo hace él solito; va encaminado a vaciar la mente y a que gracias a una respiración atenta y dirigida por ti, te vuelvas más consciente del proceso y, en definitiva, de ti.
Practicar pranayama nos beneficia de muchas maneras tanto a nivel físico, orgánico, como emocional o psicológico. “Pranayama aparta las nubes que oscurecen la inteligencia y permite que brille” B.K.S.Iyengar, maestro de yoga. Libro Luz sobre los Yogasutras de Patanjali.
La respiración es vital. Cada pranayama te aporta sus beneficios, cada uno en su forma. Así, pranayamas como Nadi Sodhana en los que se realiza una respiración alterna resultan equilibrantes, mientras que Kapalabhati, por ejemplo, resulta muy estimulante.
Beneficios para ti si practicas pranayama:
- Aumentar la capacidad pulmonar y la toma de oxígeno.
- Respirar mejor.
- Aprender técnicas de respiración.
- Practicar algo que se viene haciendo hace milenios como fundamento del yoga.
- Incrementar la resistencia para realizar esfuerzos físicos.
- Generar tranquilidad y paz mental: tener más claridad en lo que quieres hacer.
- Revitalizar tu cuerpo.
- Reducir el estrés o la ansiedad en determinadas situaciones o épocas.
- Descansar bien y dormir como un lirón.
- Ayuda al estado de meditación.
- Practicar el autoestudio.
No te quedes con las ganas, aprovéchalas y ven a practicar. Me despido con ese juego de palabras tan lindo: Prana-Y-Ama. Que seas muy feliz. Ten un buen día y cuida tu energía.
Más información: Ganesha Salamanca
*** Este mes de abril, en Yoga Ganesha el taller mensual está dedicado a practicar pranayama y meditación con japa mala (Mala, es ese collarcito de cuentas de semillas, madera o piedras). Meditación. Disfrutar a través de la respiración para entrar en ese estado meditativo. Respira.