Este martes, 16 de abril, se conmemora en todo el Mundo el Día Internacional contra la Esclavitud Infantil. Con este motivo, la concejala de Educación, Águeda Arranz, ha propuesto a los grupos municipales del Ayuntamiento suscribir una declaración que ha sido apoyada por todo el Equipo de Gobierno (formado por Partido Popular, UPyD y Carbajosa Independiente) y el Grupo Municipal Socialista.
En esta declaración se hace constar que en pleno siglo XXI sigue existiend o la explotación laboral y la esclavitud de muchos niños del mundo. “En el año 1995 el día 16 de abril un niño de doce años, Iqbal Masih fue asesinado de un disparo mientras daba un paseo en bicicleta”. Este niño se convirtió en unos los referentes más importantes de los Derechos Humanos del siglo XX. Simplemente por este motivo, merece hoy la pena recordar su historia que avala la de tantos niños que sufren en silencio esta lacra.
“Él fue víctima del trabajo esclavo infantil en Pakistán. A los cuatro años fue vendido por su padre para trabajar en una fábrica de alfombras. Cuando tenía diez años y gracias al trabajo del Frente de Liberación del trabajo forzado en Pakistán logró la libertad y se convirtió en activista. Fue un ejemplo para otros menores y con sus acciones consiguió que se cerrasen empresas donde estaban trabajando niños. Sus actos causaron un gran malestar entre los empresarios y por ese motivo fue asesinado a los doce años de edad”.
UNICEF en su último informe relativo a este problema aporta que más de 246 millones de niños en todo el mundo, con edades comprendidas entre los 5 y 14 años están siendo explotados a diario, siendo víctimas del trabajo infantil, trabajando hasta 12 horas diarias. Trabajan en condiciones extremas, sin medidas de seguridad y en clara situación de esclavitud.
Con motivo de la conmemoración de este día, y teniendo en cuenta la implicación del Ayuntamiento de Carbajosa con la infancia, se ha querido realizar esta declaración con el propósito de concienciar a toda sociedad salmantina de este grave problema que aún existe y no se ha erradicado, además de dejar claro que desde esta institución “no se va a mirar para otro lado cuando se esté hablando de Derechos Humanos”.
Según se afirma en esta declaración, “es nuestra obligación como representantes públicos ejercer cualquier tipo de acción que sume y denuncie este tipo de comportamientos que se alejan de la ética y que vulneran los principios básicos de cualquier sociedad”.