Un individuo que robó el examen de unas oposiciones para bombero en Mallorca se ha sentado en el banquillo de los acusados, porque lo pillaron al responder bien las cien preguntas del examen, incluidas las que estaban mal planteadas y que posteriormente fueron invalidadas.
Durante el juicio celebrado este martes en Palma, admitió que entró en el despacho de su madre, funcionaria que tuvo acceso al examen y que lo fotografió. Luego se aprendió las respuestas y las clavó todas.
Esa es su versión para tratar de exculpar a su madre, aunque el fiscal no cree que ella no participara en el fraude. Por eso a ella la procesan por revelación de secretos y al hijo, de inductor.
Los exámenes se realizaron en 2016 para cubrir once plazas de bombero y conductor.