Un padre sevillano se sentará este miércoles en el banquillo de los acusados por abrir una carta dirigida a su hijo de diez años.
La remitente era la tía del menor, hermana de la madre del niño que había denunciado al acusado por malos tratos de los que luego fue absuelto.
El abogado de la acusación particular pide dos años de prisión para él por descubrimiento y revelación de secretos, y una indemnización de 3.000 euros para el niño y otros tantos para la demandante.
El padre se defiende diciendo que abrió la carta por equivocación, ya que se llama igual que su hijo (aunque se supone que el segundo apellido no coincidirá).
En la carta la tía insultaba al niño del menor y le decía qué tenía que declarar en el juicio por los presuntos malos tratos a su madre.
El abogado del padre utilizó esta carta en el juicio por los malos tratos como prueba de que se estaba coaccionando al menor. Unas acusaciones de las que fue absuelto.
El fiscal pide su absolución por entender que el padre tiene la patria potestad sobre el menor lo que le permitiría abrir su correo.