Vilvestre dedicó el segundo día de las fiestas del toro a los niños, con un generoso parque de hinchables, y volvió a entregarse a su pasión por los caballos.
La jornada comenzó con una ginkana y por la tarde un parque infantil de 17 a 21 horas en la entrada de la localidad, donde se dieron cita niños y padres para disfrutar de los hinchables.
Antes de que se recogieran ya estaban disputándose las carreras de caballos en el camino hacia Mieza, en las que los jinetes exponen su integridad física ante el empuje de los animales, y los espectadores desde los muros de piedra de las eras pueden escuchar el resoplido de los caballos a su paso en medio de la tormenta que desatan sus cascos.
Una verbena puso el colofón a una agradable jornada en la localidad arribeña, desde la que se podía observar una boina de humo del incendio que lleva días activo en el otro lado del río, en Portugal.
VÍDEO DE LAS CARRERAS DE CABALLOS, AQUÍ
