Iris Annabel Goldsmith, de quince años, murió este unes aplastada por su quad cuando daba un paseo por una granja. Su acompañante no se sabe cómo está ni quién era.
El asunto pasaría a las crónicas de sucesos como uno más, pero la víctima es la heredera de dos de las familias más ricas del reino Unido, que juntas suman una fortuna de 300 millones de libras (unos 335 millones de euros).
Iris es la mayor de los tres hijos que tuvieron Ben Goldsmith, perteneciente a una rica familia de financieros, y Kate Rothschild, heredera del imperio bancario de su familia.
Se separaron en 2012 y Ben volvió a contraer matrimonio dos años después y tuvo otros dos hijos.