[dropcap]E[/dropcap]ntre Héroes y Villanos anda el juego. Héroes sin capa, que intentan abanderar causas sociales, sin más interés que el de conseguir que esas causas sigan presentes y no caigan en el olvido. Y, Villanos que utilizan esas causas para intereses personales contrarios a la ética y a la moral que rige la nobleza de un País.
Esos Héroes que caminan sin miedo por nuestros hospitales, tratando de contestarse a un ¿Por Qué? Héroes que intentan que su Ley del Silencio haga más ruido que nunca.
Héroes que aguantan golpes bajo el yugo familiar… Tantos Héroes y Causas Sociales que están pidiendo ayuda mientras piden respuestas y soluciones, se ven manchadas por esos Villanos, que intentan aprovecharse de esas situaciones para enriquecerse personalmente o profesionalmente, ya que saben que su valía es tan pobre, que de otra manera nunca llegarían a nada.
Buscar todo esto a consta de todas las personas que sufren es traficar con el dolor de la gente y jugar con la doble moral que mancha la historia de una Nación. Su propio egoísmo y su baja autoestima, no les deja ser conscientes de que todo en esta vida se consigue a base de esfuerzo y trabajo y que aprovecharse de algo así acabará teniendo sus consecuencias, porque si algo tengo claro es que la máscara acaba cayendo y entonces sus intenciones serán visibles para todo el mundo.
Nada dura para siempre, solo es cuestión de esperar. Lamentablemente, nos seguiremos encontrando con personajes de moral dudosa, que no tienen escrúpulos, pero tampoco dignidad.
En el lado opuesto, nos encontraremos con personas dispuesta a darnos su Im-Pulso, para seguir luchando por lo que creemos, que ‘La Última Salida’, se convierta en otra salida, mientras viajas a dos ruedas saboreando un buen partido de fútbol y disfrutas del placer que supone tener amigos, que son auténticos Superhéroes como aquellos que adoramos en la gran pantalla, con una gran calidad humana y con un corazón enorme que demuestran que en un mundo de Villanos, los Héroes siempre serán los vencedores.
