El astro portugués del fútbol mundial Cristiano Ronaldo pagó 323.000 euros a la mujer que le acusó de violarla en su habitación de las vegas en 2009.
Así consta en un contrato de confidencialidad suscrito por ambas partes en 2010, en el que el futbolista deja claro que eso no implicaba una confesión de culpabilidad.
El caso quedó sepultado hasta que el pasado año Kathryn Mayorga decidió demandar al futbolista luso por violación, aunque acabó retirando la demanda y la fiscalía no siguió adelante por falta de pruebas.
Según contó Mayorga, después de la violación Cristiano Ronaldo no quería dejarla marchar. «No lo recuerdo exactamente pero estoy bastante segura de que me dijo ‘lo siento’ o ‘¿estás bien?’. Insistió en que era un ‘buen tipo’ al 99%, excepto por ese uno por ciento», dijo. En su día, la mujer no identificó al futbolista como su agresor sexual.