Si apuran el plazo, como algunos suelen, hasta esta medianoche no conoceremos cómo quedan finalmente las candidaturas de todos los partidos a las elecciones del 10-N. Aunque unos y otros habían apostado en principio por repetir tal cual las listas presentadas en abril, las circunstancias han propiciado diversos cambios y varios de ellos en puestos de salida o con posibilidades de salir.
A este último respecto, el PP aporta novedades en tres circunscripciones. Una de ellas es la incorporación del ex alcalde Antonio Silván, quien pasa a encabezar la lista al Senado por la provincia, de la que lógicamente se cae la polémica ex senadora Esther Muñoz, contratada como asesora por el presidente de la Junta. De paso, el PP ha colocado como cabeza de lista al Congreso al secretario provincial del partido, José Miguel González, relegando al número dos a Carmen González Guinda.
En Zamora estaba vacante el número uno al Congreso, ocupado en abril por Isabel Blanco, la actual consejera de Familia, puesto por el que ha estado suspirando Fernández Martínez Maillo, al que Génova desplazó al Senado en las pasadas elecciones. Hoy sabremos si Maillo ha conseguido hacerse perdonar por Pablo Casado, que fue quien le relegó a la Cámara Alta como castigo por haber apoyado en su día a Soraya Saéz de Santamaría. Por último, el PP tiene que cubrir la vacante que ha dejado en la lista del Senado por Segovia el nombramiento de José Luis Sanz Merino viceconsejero de Infraestructuras de la Junta.
El PSOE registra en principio un solo cambio pero de calado, ya que afecta a la cabeza de lista al Congreso por Zamora, que pasa a ocupar su secretario provincial, Antidio Fagúndez en detrimento de Mar Rominguera, desplazada al número dos después de varias legislaturas encabezando la candidatura. Fagúndez, que fue candidato a la alcaldía de la capital en las pasadas elecciones municipales, renunció a su escaño de concejal tras firmar unos pésimos resultados, y tampoco repitió en el escaño de senador autonómico elegido por las Cortes de Castilla y León. Pero la mano de su protectora, la secretaria regional de Organización, la zamorana Ana Sánchez, se asegura ahora un escaño de diputado.
Muy a su pesar, Ciudadanos se ve obligado a introducir una serie de cambios a causa de la renuncia presentada por diversos candidatos, como es el caso de los que fueran aspirantes al Senado por Valladolid Jesús San José y Pablo Pombo, quienes han abandonado el partido dando un sonoro portazo. También tiene que sustituir como número uno por Soria a Saturnino de Gregorio, vicepresidente primero de la Diputación en pago a su apoyo al PP para desbancar al PSOE de la presidencia.
Por su parte, Unidas Podemos, además de cambiar de cabeza de lista por Valladolid, deberá reemplazar a varios de sus candidatos pertenecientes al sector de Equo que ha pactado con el partido de Errejón. Y también se esperan numerosos cambios en las listas de Vox, partido sumido en crisis internas en varias provincias de Castilla y León.
