Los padres de los niños del colegio Juan Jaén salieron este lunes a la calle para protestar por las obras de mejora de la eficiencia energética que se están realizando en el centro escolar, mientras los niños están en clase.
Los padres piden que se agilicen, porque empezaron el 2 de septiembre, a estas alturas tenían que haber terminado en seis aulas y solo se han acabado en dos, por lo que dudan que el proyecto esté concluido el 15 de noviembre, como se había prometido.
Además, los trabajos son ruidosos y generan mucho polvo, lo cual distorsiona el normal desarrollo de las enseñanzas, llegando incluso a que algunos profesores den su clase en los pasillos y escaleras del centro.
La asociación de padres pide que se refuerce la platilla, porque ahora ven pocos obreros trabajando simultáneamente, y que los trabajos ruidosos y más sucios se hagan fuera del horario lectivo, y que se trabaje en turnos de mañana, tarde y los fines de semana, ya que no se aprovechó el verano para hacer estas labores.
Eso lo han hecho constar en un escrito presentado este lunes en el Ayuntamiento en el que, además, piden que “se exija a la empresa que presente el certificado de delitos sexuales de todas las personas que están trabajando en la obra, ya que están en contacto con menores”.
“Solo dan buenas palabras pidiendo paciencia”, señala Raúl frutos, del Ampa del centro, “pero llega un momento en el que la situación es insostenible”, comenta, en referencia al alcalde, ya que la obra está promovida por el Ayuntamiento.
En el Juan Jaén hay más de 300 escolares de Infantil y primaria. Los padres entregaron este lunes un escrito dirigido al alcalde y otro al director provincial de Eduación pidiendo que se agilicen las obras y ocasionen las menores molestias posibles, y se concentraron ante la puerta del centro, protesta que repetirán este martes.