La Junta de Castilla y León espera comenzar a llegar a “acuerdos” con los principales sindicatos de la Comunidad “cuando acaben las elecciones sindicales” en el próximo mes de marzo, tras un año con un “calendario complicado” en el que “los últimos meses han estado repletos de convocatorias electorales”.
Así lo aseguró hoy en Salamanca el consejero de la Presidencia de la Junta de Castilla y León, Ángel Ibáñez, quien consideró que el inmediato futuro electoral de los sindicatos “distorsiona cualquier mesa de negociación” en la actualidad y que, por ello, toca “dar los tiempos que sean necesarios para que estos procesos vayan concluyendo”.
No obstante, Ibáñez señaló que en estos meses “la Junta no ha dejado de trabajar en el ámbito de la función pública”, como demuestran las “más de 3.200 plazas que forman parte de la oferta de empleo público de 2019 y las 650 plazas que se han convocado entre diciembre y enero, que afectan a muchos servicios en el ámbito de la función pública”.
Por ello, y dentro del “ambicioso calendario en el ámbito de la función pública en Castilla y León” con el que cuenta la Junta, Ibáñez aseguró que está “todo preparado para comenzar a cerrar acuerdos en cuanto sea posible que las mesas lo negocien”.
Además, dichas negociaciones no solo incluirán “el objetivo de recuperar las 35 horas”, algo con lo que aseguró que la Junta está “comprometida para con nuestros empleados públicos”, sino que también incluyen cuestiones para conseguir que “esta sea la legislatura de la consolidación y la estabilización del empleo público en la Comunidad, de la implantación de la carrera profesional que evalúe adecuadamente el desempeño de los empleados públicos, del avance en un nuevo convenio colectivo para todo el personal laboral de la Junta, y del primer Plan de Igualdad de Castilla y León”.
