La Audiencia Provincial de Salamanca ha condenado a una pena de dos años a una pareja que estafó más de 45.000 euros a una mujer con la que contactaron después de que esta solicitara amistad a través de un anuncio en internet en el año 2009. Los ahora condenados fingieron ser hermanos y recurrieron a una identidad falsa para, durante años pedir dinero a la víctima, aprovechándose de sus carencias afectivas y su vulnerabilidad.
La mujer respondió al anunció que había presentado la víctima y se hizo pasar por amiga suya, además de que le hizo creer que su hermano, que en realidad era su pareja, tenía interés en mantener una relación con ella, e incluso quedaron en varias ocasiones y hablaron por teléfono múltiples veces, haciéndole creer que podían tener un proyecto de vida en común.
Aprovechando esta relación de amistad por parte de la mujer y las expectativas de relación sentimental con el que creía que era hermano de su amiga, los ahora condenados requirieron a la víctima dinero (12.000 euros en una ocasión y 33.000 euros en otra) aludiendo diferentes excusas., aunque no fueron las únicas cantidades, ya que hasta el año 2015 siguió entregando dinero atendiendo a varios pretextos presentados.
Sin embargo, ese año la víctima sospechó que podía haber sufrido un engaño e interpuso la correspondiente denuncia ante la Guardia Civil de Salamanca. La víctima acude desde 1997 a consultas de psiquiatría y está considerada por la profesional médico que la atiende como una persona “sensible, muy vulnerable y dependiente afectivamente”.
Además de los dos años de prisión a cada uno de los condenados, tendrán que abonar, conjunta y solidariamente, en concepto de perjuicios causados, 45.000 euros a la víctima, y 6.000 euros en concepto de daño moral.