Los vecinos, en pie de guerra por los pisos turísticos

Piden su regulación para evitar molestias y la subida de los alquileres
serranos
La calle Serranos nace de la plaza de San Isidro, antigua cochera de autobuses. A la derecha, la Pontificia, antiguo colegio de la Compañía de Jesús.

La Federación de Asociaciones de Vecinos de Salamanca (Fevesa) y la federación que aglutina los barrios antiguos (Fauba) quieren manifestar su rechazo a la instalación sin control de pisos turísticos en la ciudad de Salamanca y exige al Ayuntamiento su urgente regulación.

 

En este sentido, recuerdan que ya hace meses que el Ayuntamiento anunció que se iba a hacer una ordenanza que los regulara pero, pasado todo este tiempo, nada se sabe de plazos para ponerla en funcionamiento.

Desde las entidades vecinales se quiere denunciar que este fenómeno está deteriorando la calidad de vida de los vecinos que sufren este alquiler de viviendas de corta estancia para turistas.

En primer lugar, uno de los problemas comunes de estas viviendas de alquiler son las molestias por los ruidos producidos puesto que, por un lado, los horarios de los turistas no coinciden con los de los residentes y, por otro, es habitual que sean lugares de fiestas y botellones. Además, en el caso de multa, el responsable es el morador y no el dueño por lo que puede ser sancionada una y otra vez la misma vivienda con el único perjuicio de los vecinos sufridores.

Por otra parte, aseguran los vecinos que existe una pérdida de seguridad por la puesta a disposición de las llaves de la puerta de entrada y del parking a terceras personas desconocidas y, muchas veces, sin identificar.

Además, el trasiego constante da lugar a que haya mayor suciedad en las zonas comunes, incremento de gasto en ascensores, desgastes por la entrada y salida continúa de personas con maletas, etc.

Por último, existe otro problema de tanta importancia como lo anterior: la mayor rentabilidad de estas viviendas turísticas está generando un incremento de los precios de los alquileres expulsando del centro a la población autóctona. Con ello se modifica la configuración del comercio y restauración de proximidad por un modelo orientado al turista, los barrios y ciudad pierden la identidad, desaparece el tejido social y entre semana se vacían las calles.

Por todo lo anterior, las entidades vecinales solicitarán una reunión con el alcalde para que el Ayuntamiento de Salamanca agilice las ordenanzas relacionadas con esta problemática de viviendas de uso turístico.

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