La consejera de Sanidad, Verónica Casado, reclamó este lunes “calma” y “prudencia” ante los planes del Gobierno de España para la ‘desescalada’ del confinamiento, que aprobará mañana el Consejo de Ministros. «No es el momento”, reiteró al tiempo que consideró debería esperarse a evaluar el impacto epidemiológico de la salida de los niños este domingo.
En una entrevista al programa ‘Hora 25’ de la Cadena SER, Verónica Casado expresó la posición contraria a iniciar la ‘desescalada’ de las restricciones derivadas de la crisis sanitaria del coronavirus Covid-19 en una jornada en la que el ministro de Sanidad, Salvador Illa, mantuvo un encuentro sobre este asunto con las autonomías.
Al respecto, Verónica Casado apuntó que es “frágil” la situación epidemiológica actual y consideró que hasta que no se compruebe si la salida de los menores de 14 años ha provocado un repunte de los contagios no debería tomarse otra medida, aunque el Gobierno prevé que los ciudadanos puedan salir a partir del domingo a la calle. “Se que es muy duro”, admitió la titular de Sanidad tras “muchísimos días” de encierro, pero recalcó que cada día se registran nuevos casos.
Igualmente, la consejera apeló a la responsabilidad y la concienciación social de la población. “Nadie tiene que decirnos como tenemos que hacer las cosas”, dijo Verónica Casado sobre el cumplimiento de las reglas establecidas para la salida a la calle. “Esto es muy serio, no es una tontería”, añadió al tiempo que advirtió de que el virus mata de una forma “rabiosa”. Por ello, insistió en que quienes incumplan las normas no engañan a nadie e hizo hincapié en la importancia de la autoprotección.
Por otra parte, Verónica Casado, que se convirtió este lunes en protagonista por su emocionado recuerdo a los profesionales sanitarios fallecidos en la Comunidad, consideró que de esta pandemia debería aprenderse que lo destinado a la sanidad pública no es un gasto, sino una “inversión”. También abogó por reforzar el sistema público ante una posible segunda oleada en otoño.
Finalmente, la consejera reconoció el papel de la sociedad al cumplir la cuarentena social y el trabajo de los profesionales, tanto sanitarios, como de otras áreas, que aseguró han ayudado a tumbar la curva epidemiológica. Reconoció que es “muy duro” la pérdida de vidas humanas, como las de sus compañeros en la sanidad pública de Castilla y León.
