Una vez que se empieza a paliar la escasez de mascarillas y han surgido algunas alternativas, entre lo ridículo y lo futurista, que tratan de aportar soluciones para evitar el contagio cuando salimos a la calle.
Se trata de un artilugio creado por la empresa VYZR Technologies que se ha propuesto dejemos de lado las mascarillas y nos pongamos su cápsula que cubre la cabeza y el torso.
El invento en cuestión se llama BioVYZ. Es como un casco enorme provisto de un filtro de aire que retiene e 95% de las partículas, todas las que tienen un tamaño superior a las dos micras, por lo que resulta muy eficaz para frenar las gutículas de la tos y estornudos que transmiten el coronavirus, que tienen un tamaño superior.
El casco es ligero (está fabricado en neopreno) y va sujeto al tronco con un sistema de cierre similar al de las mochilas o las riñoneras.
Su precio de momento es algo mayor que el de las mascarillas. O no, porque cuesta los que 157 mascarillas (157 euros).
This is how it looks. Smart and neat. pic.twitter.com/hCnGzvqAoK
— Meshaal Bin Hasosa (@BinHasosa) April 18, 2020