El PSOE y Unidas Podemos han pactado con EH-Bildu derogar «de manera íntegra» la reforma laboral de 2012 impulsada por el PP de forma “efectiva antes de la finalización de las medidas extraordinarias adoptadas por el Gobierno en materia económica y laboral derivadas de la crisis originada por el Covid-19″, a cambio de facilitar la prórroga al estado de alarma.
Así lo revela el acuerdo alcanzado entre los tres partidos divulgado esta noche por EH-Bildu, después de que esta formación condicionase precisamente su abstención este miércoles para facilitar la quinta prórroga del estado de alarma al compromiso claro con dicha derogación.
El acuerdo incluye el segundo compromiso para aliviar el endeudamiento de las administraciones públicas. Establece que las entidades locales, forales y autonómicas “dispondrán de mayor capacidad de gasto» para políticas públicas destinadas a paliar los efectos sociales originados por la crisis de la Covid-19.
Según el texto del convenio, dichos gastos serán, además, “exceptuados del cómputo de la regla de gasto” en las entidades locales, y la capacidad de endeudamiento de la Comunidad Autónoma Vasca y la Comunidad Foral de Navarra “se establecerán exclusivamente en función de sus respectivas situaciones financieras”.
El acuerdo obliga a “las fuerzas políticas firmantes” a dar cuenta al grupo de EH-Bildu del avance en el desarrollo y grado de implementación de los acuerdos alcanzados, que la formación vasca defiende para “profundizar en las garantías de escudo social y económico para el conjunto de pueblos y trabajadores del Estado”.
La portavoz de EH Bildu en el Congreso de los Diputados, Mertxe Aizpurua, dio por hecha esta mañana la derogación de la reforma laboral después de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, diera a su vez por hecha la abstención de este grupo en la votación para prorrogar el estado de alarma.
En su respuesta a los grupos parlamentarios, Sánchez sugirió el acuerdo sin explicitarlo al hacerlo de forma indirecta. Agradeció a EH Bildu su abstención y asegurando que el compromiso del Gobierno de derogar la reforma laboral “permanece indeleble”, pero sin matizar si sería una derogación total o no ni relacionarla con ningún tipo de acuerdo con el grupo abertzale ni especificar calendarios.