La provincia de Salamanca ocupa los primeros puestos del ranking en muy pocos apartados; no destaca por su poderío económico, ni por ganar población cada año, ni por crear puestos de trabajo… pero si hay algo que inyecta energía positiva a este territorio es el campo, esa labor que muchos desprecian y deprecian cada día, pero que el tiempo ha colocado en un lugar de privilegio. Lástima que haya sido por culpa de la peor crisis sanitaria de los últimos cien años.
Sí, Salamanca y el campo van de la mano, hasta el punto de ser el sustento de muchas familias y una pieza muy importante del PIB provincial. Y si hay un sector que destaque por encima del resto es el vacuno, que sigue reinando en el conjunto del país, hasta el punto de seguir siendo la provincia con mayor censo ganadero de toda España, posición de privilegio que ocupa desde hace ya muchos años.
Así las cosas y según los últimos datos del ministerio de Agricultura, Salamanca es la provincia que cuenta con una mayor cabaña ganadera de vacuno del país con 586.202 cabezas, la mayor cifra desde 2009, tomando como referencia los datos del mes de noviembre (también se contabiliza el censo en el mes de mayo).
Le sigue en esta clasificación, como es habitual, Cáceres con 558.807 animales (27.395 menos), ocupando la tercera plaza Lugo (448.784 cabezas), con el Principado de Asturias (396.986) y Badajoz (329.423) como siguientes en la lista.
Esta cifra del mes de noviembre de 2019 supone un incremento del censo en la provincia respecto al año anterior de 14.262 animales más, lo que supone un 2,5% en números ‘verdes’. El mayor incremento y la tendencia positiva se encuentra comparando los datos de la última década, que dejan a Salamanca con un 20% más de cabezas, al pasar de las 471.919 de noviembre de 2009, a las actuales.
Se mantienen las vacas de leche
Por otro lado, uno de los sectores que se mantiene pese a su crisis, es el vacuno de leche, que cuenta con unas cifras más o menos estables pese al transcurso de los años. Así las cosas, en noviembre de 2019, su censo alcanzó las 4.847 cabezas, número que ha oscilado un poco, pero sin dispararse mucho ni al alza ni a la baja, salvo en 2008.
En este ejercicio, los ganaderos de vacuno de leche de la provincia contaban con 5.514 cabezas, el nivel más elevado de los últimos doce años; el más bajo corresponde al ejercicio 2009, con un ‘bajonazo’ hasta los 3.290 animales.
