Muh, un joven indonesio de 31 años, conoció a su novia, Mita, de 25, a través de Facebook. Comenzaron a intercambiar mensajes y conectaron. La relación se fue afianzando y a las pocas semanas decidieron conocerse en persona. Quedaron en un café y todo fue sobre ruedas.
Demasiado rápido. Semanas después hablaron de casarse y conocieron a sus respectivas familias y poco después se casaron en Kediri, en Java Central (Indonesia).
No habían intimado desde que se conocieron y tampoco lo hicieron en la noche de bodas, porque Mita se negó, y tampoco al día siguiente,… Ni él ni los invitados a la boda sospecharon nada.
La prensa local no explica cómo descubrió el secreto de su mujer en el segundo día de casados, que en realidad era un hombre, pero cuando supo lo que ocurría su mujer ya se había marchado y él se divorció y denunció por fraude a su pareja.
La policía inició una investigación y dio con el paradero del joven, que se llama Adi.