La economía de Castilla y León sufrirá una caída del 7,7 por ciento este año, lo que supone tres décimas menos que la media española, con un descalabro del ocho por ciento, por el impacto de la pandemia del COVID-19 y el confinamiento. Así lo recogen las previsiones actualizadas del Centro de Predicción Económica (Ceprede), sobre los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE)
ICAL. De esta forma, ajusta a la baja la predicción para 2020, del menos 6,6 por ciento al menos ocho por ciento de crecimiento económico. Incluso, en el modelo de medio plazo (que incluye variables adicionales) la tasa llega al menos 8,9 por ciento. Además, esta evolución indica, según Ceprede, que la tasa de paro llegará al 19,9 por ciento en España.
Para 2021 se espera una recuperación económica, a un ritmo medio del 6,8 por ciento, después de que calcule que las comunidades autónomas experimentarán un retroceso de entre el menos 5,5 y el menos 10,9 por ciento. Castilla y León con un 7,7 será una de las comunidades con mejor comportamiento, después de que en mayo la caída fuera del 10,8 por ciento en la Comunidad.
Asimismo, Ceprede prevé un mejor comportamiento de la economía este año en Madrid (-5,5 por ciento), Aragón (-6,8 por ciento), Cantabria (-7,4 por ciento), Asturias (-7,5 por ciento) y Ceuta y Melilla (-7,6 por ciento). Por el contrario, la caída del Producto Interior Bruto será más intensa en Canarias (-10,9 por ciento), Murcia (-10,6 por ciento) y Baleares (-10,5 por ciento).
No obstante, Ceprede precisó que estas cifras estarán condicionadas en función de la oferta productiva de cada territorio, de su empleo y de las complicaciones que puedan surgir por rebrotes del virus. Entre las más expuestas están las grandes capitales y las zonas más receptoras de turistas.
Finalmente, el Centro avanzó que realizará cambios en las previsiones después del 27 de julio, fecha en la que el INE publica los datos regionales (CRE) de 2019.