La Junta de Castilla y León priorizará a las personas con mayor tiempo en situación de ERTEs en su complemento de ayuda a los trabajadores afectados por expedientes y mantiene el tope de seis millones de euros de gasto acordados en el marco del Diálogo Social, una cantidad que los agentes sociales consideran insuficiente para la magnitud del problema. Pese a ello, la orden supedita las ayudas a las disponibilidades presupuestarias. El líder dela oposición, Luis Tudanca, considera «gravísimo» que Mañueco incumpla un acuerdo adoptado en el marco del diálogo social.
ICAL
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, la consejera de Empleo e Industria, Ana Carlota Amigo, detalló las novedades de las Bases Reguladoras, cuya orden publica hoy el Bocyl, de la línea de ayuda destinada, en el ámbito de Castilla y León, a personas trabajadoras afectadas por expedientes de regulación de empleo de suspensión de contratos de trabajo o reducción de la jornada, por causa de fuerza mayor como consecuencia de la crisis ocasionada por la COVID-19.
Amigo argumentó que la modificación se produce porque en el mes de marzo, cuando se firmaron los acuerdos del Diálogo Social, se desconocía el alcance de la crisis originada por la pandemia y aseguró que se cumple el acuerdo con el Diálogo Social, con cuyos representantes aseguró que se ha reunido para avanzarles las bases.
Tras manifestar que ahora no tienen una estimación de los trabajadores que contarán con el complemento hasta que se convoque a ayuda y se compruebe cuántos la solicitan, la consejera explicó que esta ayuda, de 7 euros por jornada, será aplicable a las personas que haya tenido suspendido o reducido su contrato al menos 45 días dentro del período subvencionable que establezca la convocatoria y para su cálculo tendrá un tope de 90 días. Tendrán derecho a la misma aquellos trabajadores que no superen una base de cotización de 1.600 euros o la cantidad correspondiente en caso de contrato parcial.
La consejera insistió en que las nuevas bases, que sustituyen a las publicadas el 30 de abril, benefician a los trabajadores que han sufrido durante más tiempo un ERTE y destacó también que la ayuda la solicita el interesado y no la empresa. También, se prioriza a trabajadores de empresas de hasta 250 empleos para centrarse en pymes.
La intención de la Consejería de Empleo e Industria es agilizar todos los trámites para publicar la convocatoria y que los interesados puedan presentar su solicitud, afirmó Amigo, que añadió que en este momento es difícil realizar una estimación del número de trabajadores a los que la Junta pagará los 7 euros como complemento de ERTE.
Según se recoge en la orden, las circunstancias actuales obligan a adecuar la de 30 de abril de 2020 por la que se establecen las bases reguladoras de una línea de ayuda destinada, en el ámbito de Castilla y León, a personas trabajadoras afectadas por expedientes de regulación de empleo de suspensión de contratos de trabajo o de reducción de la jornada como consecuencia del COVID-19.
En concreto, detalla que se priorizan los expedientes de regulación de empleo de suspensión o reducción de jornada por causa de fuerza mayor frente a otros supuestos.
Tanto los sindicatos como la oposición han acusado a la Junta de incumplir los acuerdos firmados el 25 de marzo con el Diálogo Social, si bien la consejera aseguró que con las bases publicadas hoy se cumple con lo suscrito con patronal y centrales sindicales, al igual que explicó el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, en las Cortes.
Tudanca protesta
El secretario general del PSOE de Castilla y León, Luis Tudanca, calificó de “gravísimo” e “intolerable” que el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, incumpla los acuerdos del Diálogo Social con las nuevas bases regulatorias de los ERTE.
“Alguien que pretende gobernar la Comunidad no puede incumplir la palabra dada”, sentencia Tudanca a través de un comunicado difundido por su partido en el que se refiere de esa manera a la orden que publica el Bocyl en relación a las ayudas complementarias de ERTE, rechazada por sindicatos y patronal.
Según el líder socialista, “una vez más Mañueco demuestra que no cumple lo que promete ni lo que firma, no tiene palabra”, a la vez que suscribe el contenido del comunicado conjunto emitido por CCOO, UGT y Cecale en el que han considerado como una “agresión sin precedentes” al Diálogo Social, una de las señas de identidad de nuestra Comunidad, la decisión de la Junta.
“Lo que ha hecho hoy la Junta de Castilla y León, el PP y C’s, al recortar las ayudas a los trabajadores que se encuentran en un ERTE, es gravísimo”, aseguró tras comprobar que lo pactado en el seno del Diálogo Social con sindicatos y patronal no se cumple y se recorta “notablemente de manera unilateral”.
Se trata, de nuevo de un “incumplimiento de la palabra dada” por el señor Mañueco, pero, en este caso, agravado porque la Junta deja “abandonados” a los trabajadores y trabajadoras de esta tierra “en la peor crisis y la peor situación de nuestra historia”, concretó.
Tudanca volvió a criticar, como lo hizo en el pasado Debate sobre Política General de la Comunidad, que “los trabajadores de esta tierra no sólo no han recibido aún ni un euro en ayudas, sino que ahora recortan las pocas ayudas comprometidas, incumpliendo lo acordado”. “Es intolerable”, concluyó.
Indignación
El secretario general de Podemos en Castilla y León, Pablo Fernández, acusó a la Junta de “agredir” el Diálogo Social con sus bases reguladoras para las ayudas complementarias de ERTE y apuntó directamente al presidente Alfonso Fernández Mañueco por incumplir lo acordado con sindicatos y patronal.
A través de un comunicado, el líder de Podemos manifestó que Fernández Mañueco vuelve a “mentir” y recortar de “forma lamentable” las ayudas a los ERTE y a los autónomos, a la vez que indica que se trata de “un hecho sin precedentes” y que “es indigno tener un presidente tan mentiroso que traiciona a los trabajadores y trabajadoras y que ha hecho de la mentira su modus operandi”.
En tal sentido, califica de “impresentable, injustificable y abyecto” la posición de la Junta con los ERTE y entiende que se trata de “una acción lo suficientemente grave como para pedir la dimisión del presidente Mañueco”. “Castilla y León necesita un presidente que esté a la altura, necesita un liderazgo fuerte y lo último que precisa es un mentiroso al frente del ejecutivo autonómico”, concluye.
Es por todo ello que afirma que se plantea romper el pacto por la recuperación, que rubricó por “lealtad a la ciudadanía”, pero que a la vista de los hechos no quiere “caminar de la mano con un presidente que ha hecho de la mentira su acción política, con un presidente que traiciona a los trabajadores y a las trabajadoras, que engaña a los integrantes del diálogo social, que no tiene palabra y que en momentos tan complicados como estos miente e incumple lo firmado y lo acordado”.