Los agricultores de la provincia de Salamanca se encuentran inmersos en plena recolección de los cereales en una campaña ‘bipolar’ que se prevé buena en rendimientos, pero mala en lo que a precios se refiere.
La cebada es el cultivo más madrugador, con zonas de la provincia en las que ya se ha cosechado más de un 50% (comarca de Peñaranda y localidades próxima a Ávila) porque son los profesionales que comienzan primero. No en vano, en el trigo, aún se han cosechado menos parcelas.
“De momento, la cosecha está siendo buena en Salamanca; como siempre, hay zonas mejores y peores porque algunas fueron afectadas por el hongo en el trigo y eso les ha restado producción. Pero, en líneas generales, los rendimientos son buenos”. Así lo ha indicado Raúl del Brío, vicepresidente de Asaja Salamanca, quien ha asegurado que la media en trigo y cebada puede oscilar entre 3.500 y 4.000 kilos por hectárea.
No en vano, las zonas más fértiles, como puede ser La Armuña, pueden contar con parcelas que tengan rendimientos de hasta 5.000 kilos por hectárea, al igual que en algunas otras zonas como las comarcas de Alba o Peñaranda.
“Es más o menos lo que esperábamos, viendo cómo estaba el campo. Habrá excepciones en algunas partes de la provincia donde el hongo haya hecho más daño en el trigo o donde la sementera no se puedo realizar en las mejores condiciones por el exceso de humedad en la tierra”, asegura Del Brío.
En lo que se refiere a la avena, es probable que sea el cereal que cuente con un mayor rendimiento, en torno a los 4.000 kilos siempre que hablemos de la avena de grano y no de la forrajera, que da menos producción. En cuanto a la colza, las previsiones también son optimistas, 3.000 kilos por hectárea, aunque la superficie sembrada es menor por las complicaciones de otras campañas en la sementera. La producción de paja también será notable en un año bueno en este sector.
“Lo más normal será que el agricultor no venda pronto, porque para hacerlo a bajo precio siempre hay tiempo; hay que vender lo mínimo posible a estos precios. La incertidumbre económica también influye en este sector porque si los sectores ganaderos no ganan precio, se venderá mucho menos pienso; es una cadena”, concluye Del Brío.
La Lonja de Salamanca cotizó el pasado 29 de junio el precio de la cebada a 143 euros por tonelada, mientras que la avena lo hizo a 138 y la colza a 398 euros, con la vista puesta en lo que ocurra en próximas semanas.