[dropcap]D[/dropcap]icho de una palabra o de una expresión: Que, respecto de otra, tiene el mismo significado o muy parecido, como empezar y comenzar”. Ésta es la acepción que la Real Academia Española (RAE) recoge sobre la palabra ‘sinónimo’… o lo que es lo mismo, que no importa decir un vocablo u otro.
Ante esta situación, hablar de Cristo Medina es hacerlo de la palabra ascenso, no hay lugar a la equivocación; y es que, el jugador pacense (15-01-1987) es el señor de los ascensos, después de haber conseguido en su trayectoria deportiva la friolera de ocho desde Tercera a Segunda B. Y esto aún no ha terminado…
Cerro Reyes (2009), Sporting Villanueva (2011), Burgos (2013), Mérida (2015 y 2019), Extremadura (2016), Unionistas (2018) y Villanovense (2020) son los hitos que figuran en la trayectoria de un jugador muy querido allá por dónde va. Basta con ver el recuerdo que dejó en Unionistas CF en sus dos campañas en el club, donde además de lograr el ascenso, sigue siendo el máximo goleador en la historia del club salmantino.
La mayor parte de su carrera deportiva ha tenido lugar en Tercera, salvo dos etapas en la categoría de bronce del fútbol español, en las filas del Cerro Reyes (23 partidos y 4 goles) y el Mérida (18 partidos y 3 goles en media temporada).
Ahora, y con la perspectiva que da el tiempo, Cristo guarda mejor recuerdo de la gente, del cariño recibido y de su felicidad, que del hecho de haber sumado ya ocho ascensos de categoría. Respeta a los que le llaman injustamente ‘tercerola’ y defiende a capa y espada su trabajo en el fútbol, un deporte que le ha llevado a ser un hombre récord en el fútbol español.
Intensa etapa en el Villanovense: “La verdad es que este año no pensé que pudiera jugar un play off de ascenso porque empecé en el Mérida en Segunda B, con mucha ilusión y ganas. Vine al Mérida para ascender y jugar en esta categoría y lo hice, pero las cosas en el plano deportivo no fueron bien y me ofrecieron la idea de salir cedido y lo hice. No en vano, estaba contento con mi rendimiento por lo jugado y porque marqué 3 goles. Pero bueno, firmé por el Villanovense el 31 de enero y jugué un mes y poco antes del confinamiento, disfrutando mucho del fútbol. Es una pena todo lo que está pasando”.
Entrenar sin competir: “Se nos hizo un poco largo; empezamos a entrenar el 2 de junio para preparar los play offs y es cierto que fue un poco pesado por todo lo ocurrido, pero teníamos el objetivo de ascender y el trabajo hecho sabe mucho mejor con este gran resultado”.
Ocho ascensos: “Es algo muy complicado, sin duda; imagina si es difícil una vez, ocho… aún no me lo creo, porque además lo he hecho con varios equipos y creo que con el paso del tiempo aún lo valoraré un poco más. Estoy muy satisfecho por haber podido ayudar a estos equipos a subir de categoría”.
Hacer feliz a otros: “Al final, cuando estás en estas categorías, es lo que te queda. Hay un club, un equipo y una afición detrás, todos muy familiares y que se dejan la piel por lograr el objetivo fijado. Y eso me ha hecho muy feliz y hace que todo valga mucho más la pena”.
Buen recuerdo allá donde ha jugado: “Es algo que para mí es muy importante; allí donde he jugado siempre me recuerdan con cariño y eso me lleno mucho más que otra cosa, Poder ir a Mérida, a Burgos o a Salamanca (Unionistas), entre otros, y saber que me van a recibir bien es lo más bonito y algo que llevo con orgullo”.
Los ascensos, uno a uno:
El primero, con el Cerro Reyes: “Fue algo muy novedoso; era un crío y me hizo mucha ilusión; era un equipo de barrio de Badajoz y además disputé mi primer año en Segunda B allí. Jugué más de lo que esperaba, aunque fue una pena porque el club desapareció más tarde”.
El último, con el Villanovense: “Ha sido el más reciente y siempre lo recordaré por mi llegada en enero y las circunstancias que hemos vivido por la Covid-19, en un año difícil y complicado para todos”.
Sporting Villanueva: “Era un equipo de un pueblo de 800 habitantes y fue muy especial. Al final, el presidente optó por hacer un buen equipo y se dieron las condiciones para poder ascender. Fíjate que no se cobraba ni entrada por ver los partidos. Fue mi segundo ascenso”.
Burgos: “Tuve que salir de mi tierra por varios motivos y llegué a un club como éste, con el objetivo de ascender. Fue un año muy bonito, me trataron muy bien y pude ascender con un equipo histórico”.
Mérida: “El primero (2015) fue muy deseado por todos porque el año anterior no se pudo lograr; el club estaba creciendo, con nuevo nombre y una afición entregada. Y el segundo ascenso (2019) fue cuando decidí dejar Unionistas para ayudar al Mérida a subir cuando había bajado el año anterior y lo logramos. Además, fui pichichi del grupo”.
Extremadura: “Salí del Mérida y recalé aquí para ascender; tuvimos un buen equipo y fue un año especial. Y luego, más tarde, subieron a Segunda División”.
Unionistas CF: “Muy, muy especial; fue un punto de inflexión en mi carrera porque había logrado muchos ascensos y ya no quedaban muchos equipos que me quisieran. Decidí apostar por un club humilde que debutaba en Tercera y los dos años que allí he pasado son inolvidables. El cariño es mutuo y es un club que siempre recordaré”.
Su recuerdo de Unionistas CF: “De los dos años, es difícil quedarme con algo en concreto. Vivir en Salamanca para mí fue un privilegio y pude entrenar con grandes compañeros e hice amigos como Javi Navas, Manjón y, como no Chuchi… logramos un objetivo muy bonito”.
Jugar con Unionistas en Segunda B, ¿espinita clavada?: “No, no la tengo porque fui yo el que decidió que no iba a seguir en el club. A veces sí que pienso qué hubiese pasado si me hubiese quedado, pero son decisiones que se toman y creo que fue la acertada porque subí con el Mérida. Pero siempre me quedará esa duda…”.
Máximo goleador de Unionistas: “Sí, aún soy el máximo goleador y creo que lo será un tiempo más, porque marcar goles en Segunda B es más difícil que en Tercera, y es un orgullo”.
¿Por qué no ha jugado más en Segunda B?: “Pues voy a ser sincero, porque no tendré el nivel; cuando han decidido prescindir de mí, digo yo que por algo será y tengo que respetarlo. Me lo tomo como algo normal y no me vengo abajo, ni mucho menos. Yo sigo trabajando para lograr los objetivos cada año”.
Historia viva del fútbol español: “Es algo que recordaré siempre; hay mucha gente que me dice que soy un ‘tercerola’, y que solo logro ascensos de Tercera a Segunda B. Pero creo que es a una liga nacional y que tiene su importancia; los que están dentro del fútbol saben lo difícil que es. A los que piensan lo contrario, también hay que respetarles”.
¿Más ascensos?: “No sé… mis amigos me dicen que hasta que no llegue a diez no puedo parar (ríe). Incluso a veces decimos que con 37 o 38 años me va a llamar algún equipo porque así asciende seguro (ríe de nuevo). La idea ahora es quedarme en el Villanovense porque estoy muy bien y creo que es un equipo con aspiraciones muy buenas la próxima temporada. Pero, ojalá haya más ascensos, sí…”.
Fútbol y coronavirus: “Miedo tenemos, claro, como todo el mundo. Nosotros hemos estado más expuestos porque no nos hemos concentrado y nos hacían tests antes de cada partido y al empezar a entrenar, no más. Aunque hay que reconocer que el Villanovense ha hecho las cosas muy bien, cumpliendo el protocolo a rajatabla”.
¿Se queda con un ascenso?: “No puedo elegir solo uno, porque sería muy injusto; todos tienen su historia y han sido especiales. Llevan mi trabajo, mi cariño y no puedo elegir el primero, el último, el de Unionistas o Mérida; no podría…”.