[dropcap]¿[/dropcap]Conoces La vida de Pi? Una historia de confianza y superación de la que hablaremos hoy. Te doy la bienvenida a la columna veraniega de la serie arte y yoga.
Para esta primera semana de agosto comenzamos con una película que trae mucha filosofía de yoga, es una tierna historia que te recomiendo que visualices. Es un film más ‘para todos los públicos’ así que cualquier momento puede ser bueno para ponerte tus ojos de yogui y disfrutar de esta historia basada en un libro. Concretamente basada en la novela de Yann Martel, que se desarrolla en medio del Pacífico.
Como datos técnicos, te digo que es un film de EEUU, del año 2012 y que fue dirigida por Ang Lee. Catalogada como una película de aventura y drama, te hace llegar su bonito mensaje de autoconocimiento y superación. Con muy buena puntuación por parte de la crítica, en mi criterio merecida.
Sin hacerte spoiler, te cuento que la relación que aparece en La vida de Pi es peculiar y emocionante, con alguna escena durilla. Es una historia llena de simbolismos que te animo a descubrir, nos muestra la importancia de la confianza en uno mismo para ir superando las adversidades que en ocasiones trae la vida. Porque como digo muchas veces en las prácticas de yoga, el verdadero yoga está fuera de ese perímetro de tu esterilla y de la sensación de calma de la escuela. El yoga cotidiano es el que practicamos en nuestro día a día. Porque la vida te va a entregar situaciones agradables que salen como tú quieres, y otras desagradables que no es lo que deseas que ocurra, y aquí es donde está esa vida de yoga.
A modo de curiosidad, esta obra también ha sido llevada al teatro en Inglaterra en el año 2003, dirigida por Keith Robinson. Y otra curiosidad es el nombre de un personaje, Richard Parker, que fue llamado así después de un error de transcripción.
La película de Ang Lee es una extraordinaria historia galardonada con numerosos premios, como cuatro Óscar (mejor banda sonora, mejores efectos especiales, mejor director y mejor fotografía). También cuenta con un Globo de Oro a la banda sonora, por mencionar algunos.
En mi opinión, diría que es una historia a la vez bella, perfecta, desesperada y conmovedora. Observa tus ojos de yogui que en algunos instantes se ensancharán sus pupilas…
La vida de Pi está cargada de filosofía y no te dejará indiferente. Para darle más emoción, te lanzo una pregunta por si la ves: ¿Qué representa el tigre en esta película?…
Que tengas un buen día y cuides tu energía.
PD: Si este mes de agosto te apetece practicar yoga, aquí está la propuesta. Un taller dedicado a la humildad desde la esterilla para llevarla fuera de esta.