Castilla y León es una de las tres comunidades autónomas que estudia si prohíbe fumar en la calle como ha hecho Galicia a partir de este jueves.
En concreto, la Xunta prohíbe quitarse la mascarilla “bajo ningún concepto” en la calle si no se puede mantener una distancia de seguridad de dos metros con otras personas, lo que equivale a prohibir bajarse la mascarilla para darle unas caladas al cigarrillo o vapear.
Precisamente la excusa de fumar es una de las más recurrentes entre quienes van sin mascarilla, junto a hablar por el móvil y llevar el botellín de agua para parecer que van bebiendo si se cruzan con un agente.
Según informa El País, Castilla y León ha planteado instaurar esta prohibición en la región en el grupo técnico asesor del Gobierno regional, pero todavía no se ha tomado una decisión.
Además de Castilla y León estarían planteándose seguir los pasos de Galicia otras regiones como Andalucía y Castila – La Mancha.