El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, descartó este jueves, 3 de septiembre, la solicitud de un estado de alarma regional ya que “no estamos para tomar medidas de estas características” en el momento actual, y pidió al Gobierno de España “estar, junto a las Comunidades Autónomas, en la primera línea” de la lucha contra el virus, que según el presidente de la Junta “no entiende de colores políticos ni de fronteras territoriales”.
ICAL.- En ese sentido, Mañueco valoró como “oportuna” la reunión mantenida ayer por el ministro de Sanidad, Salvador Illa, con los consejeros de Sanidad de Castilla-La Mancha, Madrid y Castilla y León al abrir “una línea de colaboración” entre estas Comunidades y el Gobierno para “tomar medidas adecuadas, eficaces y rápidas”.
Y es que, como recordó el presidente de la Junta de Castilla y León, “el Estado tiene dos motores: los Gobiernos autonómicos y el de España”, aunque matizó que, desde el fin del estado de alarma, los ejecutivos autonómicos van “a velocidad de crucero” y el Gobierno de España “todavía no y tiene que anticiparse”, ya que “cuando ha tomado medidas de coordinación, lo hemos estado apoyando” desde Castilla y León.
Por eso Mañueco pidió al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, “que no se eche a un lado” y ponga al Gobierno “en la primera línea de lucha contra la pandemia, donde las Comunidades Autónomas siempre hemos estado” y donde, en ocasiones, “hemos echado en falta esa presencia del Gobierno”.
“Somos fundamentales todos”, continuó el presidente de la Junta, quien pidió al Gobierno “una herramienta intermedia entre el estado de alarma y la situación actual para ser más rápidos y eficaces”, descartando solicitar un nuevo estado de alarma a nivel regional puesto que “no estamos para tomar medidas de estas características”.
Además, también quiso mostrar su solidaridad con la Comunidad de Madrid al solicitar “vigilancia y trabajo de manera coordinada” entre Gobierno y región para el aeropuerto de Barajas, como “puerta de entrada de gran parte de los visitantes”, y no quiso entrar en polémica tras las declaraciones realizadas ayer por el presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, sobre Isabel Ayuso, puesto que “lo que toca es trabajar codo con codo”.
Valladolid y Salamanca
Mañueco realizó estas declaraciones durante su intervención en el programa ‘Ya es mediodía’ de Telecinco, donde el presidente de la Junta de Castilla y León defendió, en primer lugar, que las medidas preventivas puestas en marcha desde este jueves en Salamanca y Valladolid “no son exactamente fases” sino que “se anticipan a la evolución epidemiológica” de ambas ciudades restringiendo “la concentración de personas y los actos masivos”, coincidiendo con las fiestas de ambas urbes.
Medidas que además defendió frente a la opinión del alcalde de Valladolid porque “la pandemia no entiende de colores ni fronteras territoriales” y, por ello, se toman “pensando en la vida y la salud de las personas de Salamanca y Valladolid”.
“Respeto cualquier decisión de cualquier alcalde de ir a los tribunales, pero poniendo en estos momentos en la balanza las actividades culturales y festivas frente a la salud y la vida de las personas, no tengo dudas”, consideró Mañueco, quien reconoció: “A lo mejor nos equivocamos, pero prefiero pasarme por exceso que quedarme corto”.
No obstante, el presidente de la Junta descartó que se trate de un confinamiento ‘light’ puesto que “no hay limitación de movimientos” salvo para “los casos positivos y sospechosos, que tienen que hacer cuarentena”. Precisamente incidió en estos últimos al asegurar que el Gobierno regional pidió “la colaboración de la Delegación del Gobierno y los Ayuntamientos” para que Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y Policías Locales “ayuden al trabajo de los rastreadores para que obliguen a cumplir el confinamiento selectivo a las personas que no lo hacen”. “El esfuerzo de muchas personas no se puede ver empañado por unas pocas”, concluyó.