La inflación sigue bajando en Salamanca, a un ritmo superior al que se registra en el conjunto del país.
En agosto, el IPC interanual (sobre agosto de 2013) se situó en el -0,7 por ciento tras bajar tres décimas.
Esa tasa es idéntica a la de Castilla y León y algo inferior al -0.5 por ciento que registró el conjunto del país.
Aunque persiste el riesgo de deflación el Gobierno considera que esta evolución es positiva para el consumo.
La bajada de agosto se produjo, sobre todo, por el buen comportamiento de los precios de los carburantes y lubricantes, los alimentos y bebidas no alcohólicas.
Por el contrario, subieron los precios del pescado fresco y la vivienda.
El IPC de agosto respecto a julio de este año experimentó un aumento del 0,1 por ciento, una décima menos que en Castilla y León y el conjunto del país.
