La Audiencia Provincial de Baleares acordó este miércoles mantener en segundo grado penitenciario al cuñado del rey Iñaki Urdangarin, que cumple una condena de cinco años y diez meses por corrupción en la cárcel abulense de Brieva desde junio de 2018.
Servimedia / ICAL.- El tribunal que condenó por el caso Nóos al marido de la infanta Cristina ha estimado los recursos de la Fiscalía contra las decisiones del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 1 de Valladolid, que le concedió una progresión de grado a régimen abierto y salir de prisión un fin de semana al mes.
Los jueces deniegan así la semilibertad a Urdangarin tras estimar dos recursos presentados por la Fiscalía contra decisiones del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 1 de Valladolid que consideraban procedente su pase a tercer grado, un régimen que le permitiría hacer su vida diaria fuera de prisión y regresar únicamente a dormir de lunes a jueves.
El auto estimatorio del recurso del Ministerio Público se agarra a la alarma social que podría producir la progresión de grado del penado dada la naturaleza del delito y el tiempo de pena que le queda por cumplir, prácticamente la mitad de la pena impuesta.
Con todo, también reconoce elementos que juegan a favor de la petición de Urdangarin tales como el tiempo pasado desde la comisión de los hechos delictivos, el hecho de que el penado ingresara voluntariamente en prisión o el entorno familiar estable que le espera a su salida de la cárcel.
Ese primer auto concluye que “no se desprende de la conducta global del interno una evolución suficientemente favorable que permita inferir una capacidad para llevar en lo sucesivo un régimen de vida de semilibertad”.
En un segundo auto, la sala estima el recurso de apelación interpuesto por la Fiscalía contra el auto de 3 de septiembre dictado por el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 1 de Valladolid que concedía a Urdangarin el tercer grado. Los jueces aseguran en él que no hay informes que avalen la necesidad de minimizar las consecuencias del aislamiento de Urdangarin, interno en una cárcel de mujeres, mediante salidas de fin de semana.
“No nos consta”, dice el auto, “que dicha situación provoque en el interno afectación psicológica alguna que deba compensarse”, insisten los jueces que añaden que las salidas de fin de semana tal y como se plantean no tienen por qué tener ningún “efecto en el tratamiento penitenciario encaminad a su reinserción”.
